Un grupo defensor de los derechos humanos dice que el gobierno de Siria transfirió prisioneros a instalaciones militares para ocultarlos de los observadores de la Liga Árabe que visitan el país.
Human Rights Watch (HRW) con sede en Nueva York, dijo que la Liga Árabe debe insistir en obtener acceso a todos los centros de detención y debe hablar cuando Siria impida que los monitores cumplan su trabajo.
El grupo dijo que quizás centenares de prisioneros fueron transferido poco antes de la llegada de los observadores, lo cuales están monitoreando la retirada de tropas, liberación de prisioneros políticos y el cese de la violencia.
El jefe de la misión de la Liga Árabe en Siria, el general sudanés Mohammed Dabi, dijo este miércoles que los observadores tienen que viajar a tres nuevas áreas, incluyendo a las ciudades de Hama, Idlib y Daraa.
Esas visitas siguen a un viaje de los observadores, el martes, a la ciudad de Homs, donde fuerzas de seguridad sirias usaron gas lacrimógeno para dispersar a decenas de miles de manifestantes.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, con sede en Londres, dijo que unos 70.000 manifestantes anti gubernamentales marchaban por el centro de la ciudad cuando las fuerzas de seguridad los confrontaron. Los manifestantes entonaban cánticos pidiendo la ejecución del presidente Bashar al-Assad.
El martes, el gobierno estadounidense condenó la reciente violencia en Siria indicando que las acciones del gobierno van en contra del acuerdo con la Liga Árabe. El Departamento de Estado dijo que si Siria continúa ignorando los esfuerzos de la Liga Árabe, la comunidad internacional considerará otras formas de proteger a los civiles.
