La protesta del jugador profesional de la NFL, Colin Kaepernick, en contra de la injusticia social contra los negros ha llegado a las escuelas secundarias.
Jóvenes jugadores de fútbol americano de varias centros educativos a lo largo del país han optado por arrodillarse, como lo hace Kaepernick, cuando suena el himno de Estados Unidos.
No obstante, en estados como New Jersey, Alabama y Massachusetts algunos encaran posibles suspensiones y otros han denunciado haber recibido amenazas.
Mary Boyle, superintendente de una escuela católica de Camden, New Jersey dijo que por no ser instituciones públicas “la libertad de expresión y todas sus manifestaciones, incluyendo las protestas, no es un derecho garantizado”, y quienes no muestren el debido respeto durante el himno nacional pueden ser suspendidos.
El mariscal de campo Michael Oppong de una escuela secundaria pública de Worcester, Massachusetts, dijo que le advirtieron que sería suspendido por un juego luego de protestar durante el himno. No obstante el distrito escolar revirtió la decisión.
“Hizo uso de su derecho constitucional sin interrumpir nada y no será disciplinado en ninguna forma por su acción”, dijo la superintendente de ese distrito, Maureen Binienda, en un comunicado.
El entrenador Dan Appino coincide con ese punto de vista.
“Los atletas estudiantiles dicen que quieren crear más consciencia de la injusticia racial en Estados Unidos”, explicó Appino “Han dejado claro que no intentan irrespetar a nuestros militares, sino que quieren abrazar la libertad de expresión y otros derechos constitucionales que los militares luchan duro por defender… es un movimiento pacífico. No me gusta mucho que se use el fútbol como plataforma para esta protesta, pero respeto la pasión de nuestros muchachos sobre este tema”.