Un grupo indígena chileno incendió el miércoles varios inmuebles, entre ellos una iglesia y una escuela, para exigir el traslado de presos mapuches que participaron del secuestro de guardiacárceles en mayo.
El ataque fue perpetrado por sujetos armados que también quemaron una posta de salud, una ambulancia y vehículos particulares en una localidad de Traiguén, 650 kilómetros al sur de la capital chilena en la región de La Araucanía, informó el coronel de la policía Patricio Martínez. Además, un enfermero sufrió quemaduras en el rostro y cuello al intentar apagar el fuego en el recinto sanitario.
El ataque fue reivindicado mediante una pancarta hallada en el lugar por el grupo Resistencia Mapuche Malleco, uno de varios grupos indígenas que se caracteriza por reclamar por la fuerza la devolución de tierras ancestrales. Son más los mapuches que persiguen el mismo objetivo por medios pacíficos.
Según la policía, la pancarta exigía el regreso a una cárcel de La Araucanía de 17 presos mapuches que el 7 de mayo secuestraron a guardias carcelarios para que les permitieran recibir visitas. Fueron sancionados con su traslado a penales más al sur del país.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, calificó el hecho de atentado criminal con características terroristas.
En La Araucanía y en la vecina región del Biobío, unos 600 kilómetros al sur, rige hace 14 meses un estado de emergencia que permite usar a los militares en colaboración con la policía en el control del orden público. Cifras oficiales indican que los ataques bajaron casi a la mitad desde la vigencia de ese estado de excepción.