El Ministerio Público de Venezuela acusó este martes al presidente encargado, Juan Guaidó, de ser el líder de una "mafia de corrupción" e informó que abrió una investigación por el supuesto desvío de fondos para ayudar a militares venezolanos exiliados en Cúcuta, Colombia.
El fiscal general designado por la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, Tarek William Saab, informó en rueda de prensa que está investigando a las dos personas designadas por Guaidó responsables por los fondos para la ayuda de los militares venezolanos exiliados.
Los involucrados serán imputados por legitimación de capitales, corrupción y asociación para delinquir.
Saab aseguró que este caso demuestra de que Guaidó no es de confianza para ejercer "verdadero poder" y lo señaló por ser el líder de una "mafia de corrupción".
Este viernes, el portal de noticias PanamPost denunció que los dos encargados de supervisar la estadía de los militares venezolanos que huyeron a Cúcuta desde el pasado 23 de febrero, cuando la oposición intentó hacer ingresar la ayuda humanitaria allí almacenada, habrían desviado hasta unos 90.000 dólares, destinados a atender entre 100 y 140 exmilitares.
Los sospechosos, Rossana Barrera y Kevin Rojas, pertenecen ambos al partido de Guaidó, Voluntad Popular, y Barrera es cuñada de otro diputado cercano al líder opositor.
Saab indicó que, si bien Barrera y Rojas son los "autores materiales del hecho, Guaidó es el autor intelectual”. "El personalmente ha dirigido esta mafia de corrupción, puesto que de forma discrecional nombró a unos ciudadanos para que se robaran unos fondos y los usarán de manera bochornosa (…)", afirmó.
Explicó que los señalados "falsificaron facturas" para hacer creer que pagaban hoteles donde se alojaban los militares venezolanos, cuando en realidad eran canceladas por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). Además, los acusó de "inflar" el número real de militares que estaban siendo atendidos para "justificar el despilfarro del dinero”.
A pesar de que las acciones ocurrieron en Colombia, Saab aseguró que al ser estas personas designadas desde Venezuela, le corresponde a su jurisdicción investigar, "tanto la procedencia del dinero como su utilización”, indicó.
“El dinero se habría utilizado para gastos personales, alcohol, e incluso prostitutas, y se presume que es empleado también para financiar la desestabilización contra Venezuela", aseguró.
En una línea similar a la del fiscal, el presidente en disputa Nicolás Maduro acusó a la oposición de estar “en un festín de corrupción”, de “conspirar” y de “robar”.
“Cuando sacan por aquí 1.000 dólares para la conspiración, se están embolsillando 500.000, 600.000 dólares. Una derecha golpista, vende patria y muy ladrona”, afirmó Maduro.
Oposición pide a Colombia investigar
Un día antes de que surgieran estos señalamientos, el líder opositor realizó una comparecencia ante de prensa y detalló que ya su embajada en Colombia había adelantado la investigación y que un informe administrativo sería entregado este martes en Bogotá.
Guaidó, igualmente indicó que las dos personas involucradas ya habían sido separadas del cargo y recalcó que los fondos a los que hacen referencia en la denuncia no son públicos o de ayuda humanitaria, sino recaudaciones privadas.
“Quiero destacar además en este proceso, a diferencia de los que hemos vivido 20 años con el régimen, que ante una denuncia, el claro rechazo a que no vamos a tolerar ningún elemento de duda, de mal manejo, de lo que nos ha costado tanto conseguir para atender la crisis humanitaria que vive Venezuela”, indicó.
El líder opositor aseguró que el gobierno en disputa busca confundir y de mezclar “peras con manzanas”.
“Hay una generación distinta de hacer política. Que no tiene miedo de rendir cuentas. Que tiene claro que su responsabilidad es con el país”, indicó.
