Sudáfrica invirtió más de $4.300 millones de dólares en la copa mundial de futbol y ahora espera elevar el producto interno bruto del país en un 0,5 por ciento.
El dinero se invirtió en la construcción y renovación de estadios, mejoras en la infraestructura de los aeropuertos y la reparación de algunas calles y autopistas.
El gobierno asegura que más de 450.000 turistas habrán visitado el país al final de la copa y muchos aprovecharán para visitar sitios turísticos e históricos, incrementando el ingreso en turismo.
Informes gubernamentales revelan que la creación de más de 130.000 empleos ha servido para estimular la economía informal del país, aliviando el desempleo en un país donde una de cada cuatro personas está sin trabajo.
Taxistas como Jacky Sinier, asegura que la oportunidad del mundial le ha dado otro ingreso.
“Tenia un puesto en un mercado y desde ahora hasta que se acabe el mundial tengo este carro como taxi”, dijo Sinier a voanoticias.com
El evento no sólo estimula la hotelería y los servicios de restaurantes, sino además la venta de mercancía como camisetas, banderas y souvenirs.
“Todos los días vendo mis vuvuzelas, mis camisetas y leones y jirafas que la gente quiere llevarse a su país. He vendido más ahora que antes del mundial”, me explica Joseph, un vendedor de un puesto público en Johannesburgo.
El Comité Organizador Sudafricano considera que se presentará un alza de 1 punto porcentual en el PBI como resultado del evento.
El estimado económico, presentado por la Oficina del Tesoro, se hace basado en un cálculo del gasto que hacen los turistas en hoteles, restaurantes y transporte.