Los apagones seguían siendo generalizados el miércoles en Texas un día después de que otra racha de condiciones meteorológicas extremas inundó las calles y arrancó de raíz varios árboles y techos. Las autoridades dijeron que un adolescente murió en un sitio de construcción mientras trabajaba en una casa que se derrumbó.
El clima extremo del martes, que en un momento dado dejó a 1 millón de clientes sin electricidad, fue una prolongación de las mortíferas tormentas, algunas de las cuales derivaron en tornados, que se registraron en Estados Unidos durante el fin de semana festivo por el Día de los Caídos en Guerras y que provocaron la muerte de 24 personas en siete estados.
El proveedor de electricidad Oncor dijo que la energía eléctrica en el área metropolitana de Dallas debería estar restaurada para el viernes en la mayoría de los casos, pero algunos de los cortes se extenderán todo el fin de semana. Hasta ahora, la empresa ha restaurado la electricidad a poco más de la mitad de los 650.000 clientes afectados en el norte de Texas.
Las inundaciones y los daños en Houston se produjeron apenas unas semanas después de que el área fuera azotada por un evento climático conocido como “derecho” —un vendaval generalizado y prolongado que se relaciona con una banda de chubascos o tormentas eléctricas que se desplazan rápidamente. Esta tormenta provocó la muerte de ocho personas y dejó sin energía eléctrica a cientos de miles de clientes.
“Muchísimas personas están de nuevo sin electricidad. Apenas hace un par de semanas enfrentamos el derecho, que fue extremadamente devastador, y muchas personas todavía tratan de recuperarse de él”, dijo Lina Hidalgo, jueza del condado de Harris y la principal funcionaria electa del condado que alberga a Houston.
La administradora de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, Deanne Criswell, tenía programado viajar a Arkansas el miércoles, donde siete personas murieron por las tormentas del fin de semana, mientras el gobierno del presidente Joe Biden continúa evaluando los daños provocados por los tornados.
La posibilidad de fuertes lluvias, inundaciones repentinas localizadas y condiciones meteorológicas extremas continuaba el miércoles en Oklahoma y Texas. Se pronostican tormentas eléctricas la tarde del miércoles y el jueves en el este de Montana y Wyoming, y en el noreste de Colorado para que después se desplace a Nebraska, Kansas, Oklahoma y el norte de Texas.
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