Francia votó el domingo en la primera ronda de elecciones municipales, uno de los pocos eventos importantes que las autoridades no han cancelado o pospuesto por el brote de coronavirus.
Las autoridades francesas han cerrado escuelas, restaurantes y comercios no esenciales en todo el país para ayudar a frenar el brote de coronavirus que ahora cuenta con aproximadamente 4.500 casos, pero las elecciones locales siguieron adelante, a pesar de las críticas, informa la colaboradora de la Voz de América, Lisa Bryant.
Se suponía que las autoridades garantizarían un espacio de metro entre los votantes y suministrarían jabón y productos desinfectantes en las mesas de votación. A los votantes se les ha pedido que traigan sus propios bolígrafos para firmar el registro de votación.
Los analistas predicen que estas elecciones locales podrían dar un duro golpe al relativamente joven partido La Republique en Marche del presidente Macron, que aún tiene que construir fuertes raíces locales, y debido a una serie de reformas impopulares que su gobierno ha impulsado.
París se considera un campo de batalla clave, con la alcaldesa socialista Anne Hidalgo con la esperanza de cerrar un segundo mandato que la vería presidiendo los Juegos Olímpicos de París de 2024. La segunda ronda de votación el próximo domingo.
