El Fondo Monetario Internacional (FMI) pidió a EE.UU. y a Europa acciones decisivas frente a la crisis de la deuda e incrementar el ritmo de de las reformas para restaurar la confianza mundial en tiempos en que el crecimiento económico se tambalea.
Tras una reunión junto con el Banco Mundial en Tokio, los ministros de Finanzas del FMI difundieron un comunicado en el que constataron que el crecimiento económico se desacelera en medio de grandes riesgos y gran incertidumbre.
Según el presidente del comité directivo del FMI, el ministro de Finanzas de Singapur, Tharman Shanmugaratnam, la situación ha mejorado en comparación con hace seis meses, pero sigue siendo desafiante. “Persisten riesgos negativos. Y en particular todos fuimos ingenuos acerca de la naturaleza de tales riesgos”, dijo.
El ministro añadió que el “abismo fiscal” en que se halla EE.UU. y la falta de certeza acerca de cómo resolverá sus problemas, es una incertidumbre que afecta a todo el mundo. “De hecho es grave”, apuntó.
Timothy Geithner, secretario del Tesoro de EE.UU., dijo a los ministros en la reunión que Washington ha hecho progresos pero que aún le queda mucho por hacer a fin de que los asuntos financieros estén en orden.
Los comentarios de Geithner tuvieron efecto pocas horas después de que el gobierno estadounidense anunció que el déficit presupuestario se había situado por encima del billón de dólares por cuarto año consecutivo.
Los participantes en la cita también manifestaron su frustración ante el lento ritmo de las reformas para solucionar la crisis de la deuda en Europa.
En la reunion prevalecieron algunos desacuerdos, entre ellos por cuánto tiempo más países en problemas como Grecia deben seguir recortado presupuestos, y sobre si las políticas monetarias puestas en práctica para incentivar los préstamos tendrán por el contrario un efecto desestabilizador en los mercados.
Tras una reunión junto con el Banco Mundial en Tokio, los ministros de Finanzas del FMI difundieron un comunicado en el que constataron que el crecimiento económico se desacelera en medio de grandes riesgos y gran incertidumbre.
Según el presidente del comité directivo del FMI, el ministro de Finanzas de Singapur, Tharman Shanmugaratnam, la situación ha mejorado en comparación con hace seis meses, pero sigue siendo desafiante. “Persisten riesgos negativos. Y en particular todos fuimos ingenuos acerca de la naturaleza de tales riesgos”, dijo.
El ministro añadió que el “abismo fiscal” en que se halla EE.UU. y la falta de certeza acerca de cómo resolverá sus problemas, es una incertidumbre que afecta a todo el mundo. “De hecho es grave”, apuntó.
Timothy Geithner, secretario del Tesoro de EE.UU., dijo a los ministros en la reunión que Washington ha hecho progresos pero que aún le queda mucho por hacer a fin de que los asuntos financieros estén en orden.
Los comentarios de Geithner tuvieron efecto pocas horas después de que el gobierno estadounidense anunció que el déficit presupuestario se había situado por encima del billón de dólares por cuarto año consecutivo.
Los participantes en la cita también manifestaron su frustración ante el lento ritmo de las reformas para solucionar la crisis de la deuda en Europa.
En la reunion prevalecieron algunos desacuerdos, entre ellos por cuánto tiempo más países en problemas como Grecia deben seguir recortado presupuestos, y sobre si las políticas monetarias puestas en práctica para incentivar los préstamos tendrán por el contrario un efecto desestabilizador en los mercados.