Convertida este lunes en tormenta tropical el tifón Hagupit dejó un saldo de 27 fallecidos y más de un millón de personas desplazadas y ubicadas en albergues, según informó la Agencia Nacional de Desastres, en Filipinas.
El poderoso fenómeno natural también provocó inundaciones, olas altas, y dejó sin energía eléctrica a Filipinas después de tocar tierra en la costa este durante la noche del domingo.
"Lo peor ha pasado para ellos. Es un gran alivio porque se asustaron mucho de este tifón, pensando en Haiyan", explicó, la secretaria general de Cruz Roja de Filipinas, Gwendolyn Pang. "Y aún hay algunas zonas preparándose para la tormenta como Manila".
La Agencia de Meteorología de la isla aseguró que el tifón impactó primeramente comunidades pesqueras remotas en la Isla de Samar, arrancando los techos de algunas viviendas y edificios y derribando árboles y otras estructuras.
Tras el paso del tifón muchas personas decidieron volver a sus casas en las provincias afectadas, pero todavía se esperan fuertes vientos y más lluvias en una zona que todavía lucha por recuperarse de una fuerte tormenta que afectó a la isla el año pasado.
Muchas de las carreteras locales han desaparecido, mientras que otras están cubiertas por árboles caídos, y basura. La tormenta que se espera para este lunes llega con vientos de hasta 105 kilometros por hora.