El actor mexicano Eugenio Derbez acaba de estrenar la película Radical, una historia basada en hechos reales que gira entorno a los desafíos que enfrentan las escuelas en barrios de bajos recursos y en entornos violentos.
Según él, la educación es el eje vertebrador de cualquier sociedad, por lo que considera que se deben impulsar más esfuerzos para “cambiar la educación” en muchas partes del mundo. En su opinión, eso daría mayores opciones a la población para avanzar socialmente y tener mejores oportunidades de futuro.
“Creo que hay una necesidad enorme de cambiar la educación, no solo en México, sino también en toda Latinoamérica y muchas partes del mundo, como África o la India”, dijo el actor mexicano durante una entrevista con la Voz de América en Miami.
Derbez interpreta a Sergio, un joven profesor que empieza un nuevo trabajo en una escuela en la ciudad de Matamoros, México, y en un entorno especialmente complicado, marcado por la violencia y la pobreza. Gracias a sus destrezas como educador, su personaje intentará que los jóvenes estudiantes se interesen por las materias impartidas en el centro escolar.
“Esta película está basada en un hecho real que habla cómo un maestro descubrió un método que le cambió la vida a los niños”, detallaba convencido de que “es una historia muy inspiradora que te hace reír, llorar y te enoja”, pero aclara que “sales del cine con una esperanza de que se pueden cambiar las cosas a pesar de tener todo en tu contra”.
Sobre eso, considera que el hecho de tener un profesor que sea capaz de motivar a los alumnos a una edad tan temprana también, según él, cambia la perspectiva con la que estos jóvenes se enfrentan a los desafíos futuros.
“Creo que el maestro te puede ayudar, te puede cambiar la vida para bien o para mal. Hay maestros que, de repente, te trauman y te hacen abandonar una carrera. Y hay maestros que te inspiran a poder crecer y a poder seguir adelante, o incluso te hacen llegar a niveles que tú solo no hubieras podido”, decía insistiendo en que “es muy importante que el maestro crea en ti”.
Echando la vista atrás, el laureado actor mexicano, que tiene una estrella en el famoso Paseo de la Fama en Hollywood, California, recuerda que tuvo un maestro que le “inspiró mucho” en su época estudiantil gracias a un peculiar método.
“Era muy simpático y creo que el hecho de que utilizara el humor, me ayudaba a que entendiera las cosas mejor. Era muy creativo y utilizaba frases muy extrañas con las cuales nos hacía reír mucho. Estoy seguro de que era por eso que nadie quería perderse sus clases”, relataba.
Pero, por encima de todo, asegura que su “principal maestra” fue su mamá, a quien “no la dejaron ser actriz porque estaba mal visto”. Según explicaba Derbez, fue el mayor ejemplo que pudo tener para luego enfocarse en su carrera artística que lo ha llevado a ser uno de los actores y comediantes más famosos de América Latina.
“Ella finalmente, a pesar de las negativas de sus padres, fue actriz de novela y gracias a ella yo conocí el medio artístico y terminé siendo actor. Así es que ella fue mi principal maestra para aprender todo lo que sé de esta carrera”, manifestaba.
A pesar de que se quería dar el mayor realismo a la película, finalmente se decidió no filmar en la ciudad de Matamoros porque “era muy peligroso”. “Terminamos filmando en Atenco, a una hora y media de la ciudad de México, pero en un lugar que parece Matamoros. Era muy parecido según las fotos que teníamos del lugar porque, repito, es una historia real y teníamos que apegarnos mucho a la realidad”, puntualizaba.
Eso sí, utilizaron niños que no tenían ninguna experiencia en el mundo actoral para dotar de mayor realismo a la historia. “Son niños que han sufrido bullying o que pasan por todo lo que pasan los demás. El director no quería niños actores, quería gente fresca, que no estuvieran ni entrenados ni sobreactuados”, comentaba.
Esa decisión, en su opinión, ha hecho que la película recibiera tan buenas críticas porque dota de “mayor naturalidad” a los personajes. “Todo el mundo dice que los niños son espectaculares y yo creo que es por eso”, agregaba al respecto.
Hace diez años, Eugenio Derbez dio el gran salto en Hollywood con la película “No se aceptan devoluciones” (“Instructions Not Included”, en inglés) que se convirtió en una de las películas más taquilleras y exitosas, no solo en el mercado latino, también en Estados Unidos. Eso le permitió situarse como una de las estrellas en la industria del séptimo arte y consagrar su carrera.
“Siempre he luchado por tener calidad, porque siempre he querido que mi nombre sea sinónimo de calidad. Que tú veas una película y digas que si sale Eugejnio es porque va a ser buena. Y eso te cuesta muchísimos años de lucha para lograr llegar ahí”, detallaba.
Con el paso de los años, confiesa que ahora se mira con mucha más precisión los proyectos que le ofrecen, precisamente para garantizar esa calidad de la que presume. “Mi meta siempre es saber cómo escoger mis proyectos para no equivocarme. Es muy difícil no equivocarte y creo que ahí voy poco a poco”, concluye.
Radical ya se ha estrenado en algunas salas de cine selectos de Estados Unidos y América Latina. También está disponible en la plataforma VIX.
