Dos víctimas más del tiroteo en una tienda de Walmart en El Paso, Texas, murieron a causa de sus heridas el lunes, dijo la policía, elevando el número de muertos a 22 en la masacre cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, planeó una visita a la comunidad afectada.
Las últimas muertes aumentan a 31 el número de víctimas asesinadas durante el fin de semana en tiroteos masivos en El Paso y Dayton, Ohio, que han provocado un nuevo furor por la violencia armada en Estados Unidos.
Patrick Crusius, de 21 años, ha sido acusado de un solo cargo de asesinato capital en el caso de El Paso, según muestran los documentos judiciales, en lo que probablemente sea un titular de lugar legal para mantenerlo bajo custodia mientras se lleva a cabo la investigación.
Las autoridades han citado un extenso manifiesto antiinmigrante, aparentemente publicado en línea por el sospechoso antes del tiroteo del sábado por la mañana en la ciudad fronteriza hispana, que dijeron que era evidencia de que el derramamiento de sangre tenía motivos raciales.
En él, el autor calificó el ataque de Walmart como "una respuesta a la invasión hispana de Texas".
Ocho de los muertos en el ataque eran ciudadanos mexicanos, según el gobierno mexicano.
La declaración de cuatro páginas cargada en 8chan, un tablero de mensajes en línea en gran parte no moderado que los extremistas utilizan a menudo, calificó el ataque de Walmart como "una respuesta a la invasión hispana de Texas".
También expresó su apoyo a un hombre armado que mató a 51 personas en dos mezquitas en Christchurch, Nueva Zelanda, en marzo.
Los asesinatos de El Paso llevaron al fundador de 8chan, Frederick Brennan, en una entrevista con el New York Times, a pedir que se cerrara el sitio. Brennan ya no tiene el control de 8chan, que ahora es manejado desde Filipinas por un veterano del ejército de EE.UU., Informó el Times.
El gobernador de Texas Greg Abbott dijo que el episodio del sábado parecía ser un crimen de odio y los fiscales federales lo llamaron terrorismo doméstico. Un fiscal de Texas dijo que el estado buscará la pena de muerte contra Crusius si es declarado culpable.
Trump dijo que los estadounidenses "deben condenar el racismo, la intolerancia y la supremacía blanca" y culpó a Internet y a los videojuegos violentos por fomentar la violencia.
Las víctimas
Varios cientos de estudiantes, maestros y familiares llenaron el lunes un estadio de atletismo de una escuela secundaria en Texas para honrar a un adolescente de ciudadanía estadounidense-mexicana que era el más joven de los 22 muertos.
Un grupo de maestros lanzó simultáneamente 21 palomas más, una para cada una de las otras víctimas, con edades comprendidas entre los 23 y los 90 años, la mayoría de ellas con apellidos hispanos.
Estas son las historias de algunas de las víctimas:
Javier Amir Rodríguez, de 15 años, iniciaba su segundo año en la escuela secundaria cuando fue asesinado a tiros dentro de la tienda.
El Distrito Escolar Independiente de Clint, que el lunes identificó al estudiante como una de las víctimas, indicó que era alumno de la escuela secundaria Horizon en El Paso.
El distrito indicó que ha estado en contacto con su familia y envió sus condolencias. Valeria Chávez, prima del joven, dijo a la televisora KFOX-TV que Rodríguez estaba en el Walmart con uno de sus tíos, quien describió lo sucedido.
Arturo Benavides, un veterano del ejército que hace algunos años se jubiló como conductor de un autobús, estaba pagando sus compras en Walmart cuando el agresor atacó.
Su sobrina, Jacklin Luna, dijo al periódico Los Angeles Times que Benavides, de 60 años, fue uno de los asesinados. Su esposa, Patricia, estaba sentada en una banca cercana y alguien la empujó hacia uno de los baños para ponerla a salvo, comentó Luna.
Benavides, quien nació y creció en El Paso, había trabajado como conductor de autobús para el sistema de transporte metropolitano Sun Metro de la ciudad.
Iván Manzano, quien tenía una hija de 5 años y un hijo de 9, era originario de Ciudad Juárez, México, y tenía un negocio de distribución de implantes ortopédicos.
Su esposa, Adriana Manzano, se enteró de parte del FBI que su marido había sido asesinado en la masacre del Walmart. Ella viajó el lunes al consulado mexicano en El Paso para repatriar el cuerpo de su esposo, y dijo que todos lo conocían como un hombre amigable y tranquilo.
Adriana Manzano señaló que les dijo a sus hijos que su padre murió en un “accidente”, porque cree que darles una explicación detallada podría generar resentimientos.
Jordan Anchondo fue una de las personas asesinadas en El Paso, contó su hermana, y aparentemente murió mientras protegía a su bebé de 2 meses de edad de la lluvia de balas.
Leta Jamrowski, de El Paso, habló con The Associated Press mientras recorría incesantemente la sala de espera del University Medical Center de El Paso, en donde su sobrino de 2 meses de edad fue hospitalizado por las fracturas que sufrió cuando su madre cayó.
“Con base en las lesiones del bebé, dijeron que lo más probable es que mi hermana estaba tratando de protegerlo”, relató. “Cuando fue baleada, lo estaba cargando y cayó sobre él, por eso tiene huesos rotos. Así que básicamente él está vivo porque ella sacrificó su vida”.
Jordan, madre de tres, y André Anchondo, acababan de dejar a su hija de 5 años en su entrenamiento para animadoras antes de ir a comprar útiles escolares al Walmart. Nunca regresaron.
André Anchondo —el esposo de Jordan — recientemente había transformado su vida después de superar sus adicciones a las drogas y algunos encuentros con la policía, recordó un amigo.
La noche del domingo, John Jamrowski, abuelo de Jordan Anchondo, dijo en un mensaje de texto que su familia recibió la noticia del deceso de André.
Mario de Alba, de 45 años, había venido de compras a El Paso junto a su familia.
Su hermana, Cristina de Alba, lo describió como un “gran padre” y una “persona decente y trabajadora”, se encontraba el domingo en estado crítico después de que le dispararan por la espalda, la bala salió por su diafragma.
Su esposa, Olivia Mariscal, y su hija Erika, de 10 años, parecen recuperarse después de que ambas resultaran heridas, dijo De Alba desde el hospital de El Paso en el que su hermano está internado.
David Johnson, de 63 años, estaba abasteciéndose para el regreso a clases en compañía de su esposa y su nieta de 9 años, cuando fue asesinado, informaron sus familiares.
El sobrino de Johnson, Dominic Patridge, dijo en un comunicado a la televisora KVIA-TV que su tía escuchó disparos mientras se encontraba en la caja. Johnson les dijo a ella y a su nieta que “se tiraran al suelo y que si algo le sucedía a él” que corrieran hacia la tienda de al lado, relató.
Jessica Coca García y Memo García estaban en el Walmart para recaudar fondos para el equipo deportivo de uno de sus hijos, cuando el agresor comenzó a disparar y los hirió, contó un familiar.
Norma Coca dijo a la televisora KWCH de Wichita, Kansas, que su hija y su yerno estaban cerca de la entrada principal cuando fueron baleados.
Coca, quien vive en Salina, Kansas, dijo que su hija, Jessica Coca García, recibió tres disparos en la pierna. Señaló que su yerno, Memo García, sufrió dos impactos en la pierna y uno más en la espalda. Informó que su hija está en condición estable, pero su yerno se encuentra en estado crítico.