El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, recibió la vacuna contra el coronavirus, en un evento de televisión en vivo para promover la seguridad y eficacia de la vacuna y generar confianza entre el pueblo estadounidense.
Su vacunación se produce cuando las encuestas revelan que algunos estadounidenses se muestran reacios a recibir la vacuna debido a preocupaciones de seguridad y eficacia.
Pence, quien dijo que la vacuna es "un milagro médico", señaló que "el pueblo estadounidense puede estar seguro: tenemos una y quizás en cuestión de horas, dos vacunas seguras", refiriéndose a la posible aprobación de la vacuna desarrollada por la farmacéutica Moderna.
Se espera que el viernes la FDA apruebe la segunda vacuna.
Su esposa Karen Pence y el cirujano general Jerome Adams también recibieron la vacuna desarrollada por Pfizer Inc y el socio alemán BioNTech, convirtiéndose en los receptores de más alto perfil en recibir la vacuna públicamente.
El presidente electo Joe Biden espera recibir su vacuna la próxima semana.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, dijeron el jueves que se vacunarán en los próximos días. Los expresidentes Bill Clinton, George W. Bush y Barack Obama se ofrecieron como voluntarios para las vacunas públicas.
El experto estadounidense en enfermedades infecciosas Anthony Fauci, designado para ser el principal asesor médico de Biden, dijo que se vacunaría tan pronto como pudiera y estaba esperando que las dosis llegaran a los Institutos Nacionales de Salud (NIH).
"Espero que sea en los próximos días", dijo Fauci al programa "Today" de NBC el viernes.
Por su parte, el presidente Donald Trump ha alentado a las personas a vacunarse y ha defendido el programa Operation Warp Speed de su administración para promover el desarrollo y la distribución de vacunas. No obstante, ha guardado silencio sobre recibir la inyección.
Estados Unidos reportó un récord de 239.903 nuevos casos el jueves, elevando el número acumulado 17.215.067 casos, según cifras de la Universidad John Hopkins. El número de muertos en Estados Unidos está en 310.801.
Las hospitalizaciones en Estados Unidos han establecido un nuevo récord en cada uno de los últimos 20 días, acercándose a 114.000 el jueves, según un recuento de Reuters.
