Partidarios del presidente Donald Trump se enfrentaron con manifestantes contrarios al mandatario, el fin de semana en Washington, lo que provocó decenas de arrestos, varios apuñalamientos y heridas a agentes de policía, en disturbios horas después de las manifestaciones en apoyo de las afirmaciones no comprobadas de Trump de que ganó un segundo mandato.
La policía del Distrito de Columbia dijo que arrestó a casi 30 personas por una variedad de delitos, desde asalto hasta posesión de armas y resistencia a arrestos y disturbios. La violencia estalló después de la puesta del sol el sábado.
Cuatro hombres fueron apuñalados alrededor de las 10 p.m. después de una pelea en el centro, dijo la policía. Al menos un sospechoso, Phillip Johnson de Washington, de 29 años, fue arrestado por un cargo de asalto con un arma peligrosa. Un informe policial obtenido por The Associated Press dijo que al menos una de las víctimas identificó a Johnson como la persona que lo apuñaló.
Ocho policías también resultaron heridos durante las manifestaciones, dijeron las autoridades.
Las manifestaciones anteriores de los seguidores de Trump, en su mayoría sin mascarilla, tenían la intención de ser una demostración de fuerza solo dos días antes de que el Colegio Electoral se reuniera para elegir formalmente al demócrata Joe Biden como el 46 ° presidente. Trump, cuyo mandato terminará el 20 de enero, se niega a ceder, mientras se aferra a denuncias infundadas de fraude que han sido rechazadas por los tribunales estatales y federales, y el viernes por la Corte Suprema.
Una manifestación a favor de Trump el mes pasado, que atrajo de 10,000 a 15,000 personas a la capital, también terminó un sábado por la noche con enfrentamientos dispersos entre los aliados de Trump y activistas locales cerca de la Plaza Black Lives Matter, cerca de la Casa Blanca.
El sábado, la policía tomó más medidas para mantener los dos lados separados, cerrando una amplia franja del centro al tráfico y sellando la Plaza Black Lives Matter.
Pero aunque las manifestaciones del sábado, incluida una en Freedom Plaza en el centro, fueron más pequeñas que las del 14 de noviembre, atrajeron a un contingente más grande de Proud Boys, un grupo neofascista conocido por incitar a la violencia callejera. Algunos llevaban chalecos antibalas mientras marchaban por la ciudad.
El grupo ocupó titulares después de que Trump en septiembre les dijera que "se aparten y se mantengan al margen".
Después de que terminaron las manifestaciones, el centro de Washington se convirtió rápidamente en multitudes de cientos de Proud Boys y fuerzas combinadas de Antifa y activistas negros locales, ambos lados que buscaban un enfrentamiento en un área inundada de policías.
Al anochecer, se enfrentaron en lados opuestos de una calle, con múltiples líneas de la policía de la ciudad y la Policía Federal del Parque, algunos con equipo antidisturbios, manteniéndolos separados.
