El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, auguró este miércoles que será el Tribunal Supremo el que deberá definir al ganador de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, algo que sólo ocurriría en caso de que los resultados oficiales sean impugnados.
"Creo que todo esto acabará en la Corte Suprema", declaró el mandatario a un grupo de periodistas reunidos en la Casa Blanca al referirse a los comicios y a la necesidad de nombrar a un nuevo magistrado para la máxima instancia judicial.
Trump volvió a acusar a los demócratas de estar orquestando un "fraude" electoral que obligaría a la Administración a impugnar los resultados. Desde hace meses, el presidente argumenta que el deseo de la oposición de reforzar los mecanismos de voto por correo obedecen a una maniobra para interferir en las elecciones y no a la necesidad de ofrecer a los ciudadanos una alternativa que, debido a la pandemia, les permita emitir su sufragio sin tener que pasar por los centros de votación.
Cabe señalar que en caso de que los resultados oficiales sean impugnados por una de las partes, recae en el Tribunal Supremo decidir quién es el vencedor de los comicios, tal y como pasó en las elecciones presidenciales del 2000, cuando la Corte proclamó vencedor al republicano George W. Bush frente al demócrata Al Gore.
Trump reconoció que ese es uno de los motivos por los que la Casa Blanca se está apresurando a presentar un candidato para ocupar la vacante en el Tribunal Supremo tras la muerte de la jueza Ruth Bader Ginsburg, el pasado viernes.
"Creo que es muy importante que contemos con nueve magistrados y creo que el proceso va a ser muy rápido", opinó.
El presidente consideró que es necesario recuperar el número tradicional de magistrados en el tribunal, ya que según dijo la actual situación, con ocho magistrados, "no es una buena situación". "Creo que es muy importante que haya nueve jueces", zanjó.
A pesar de que la decisión de nombrar a un nuevo magistrado del Supremo a falta de pocas semanas para las elecciones ha desatado una fuerte controversia en el país, Trump volvió a insistir en que es una de sus prerrogativas tras haber resultado "electo" en los comicios de hace cuatro años y subrayó que incluso podría confirmarse el nombramiento después de los comicios, cuando el actual gobierno se encuentre en su periodo de gracia antes del final de su mandato, el 20 de enero.
