El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, abogó hoy por prohibir la venta de armas de asalto y de cargadores de alta capacidad después de que este lunes un ciudadano matara a diez personas en una tienda de comestibles de la localidad de Boulder, en el estado de Colorado.
"Podemos volver a prohibir las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad, conseguí hacerlo cuando era senador y redujo estas matanzas", dijo Biden en referencia a una legislación aprobada en 1994 que vetaba este tipo de armamento, pero que apenas duró diez años. "Deberíamos hacerlo de nuevo".
La aprobación de una legislación sobre la posesión de armas fue una de las grandes prioridades de la Administración Obama, de la que Biden fue vicepresidente, sin embargo, siempre se topó con la negativa del Congreso.
El presidente, que se dirigió a la nación desde la Casa Blanca, dijo no necesitar esperar "ni un minuto, mucho menos una hora" para adoptar medidas "de sentido común" que servirían para "salvar vidas" ni para "urgir" a los legisladores en el Senado y en la Cámara de Representantes para "actuar".
"Esto ni es ni debería ser una cuestión partidista. Esta es una cuestión estadounidense y salvará vidas", concluyó Biden, quien no aceptó preguntas, antes de partir rumbo a Ohio, donde tiene previsto celebrar el décimo aniversario de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio, más conocida como Obamacare.
La vicepresidenta Kamala Harris, calificó el hecho de "absolutamente trágico". "Diez personas, en sus actividades cotidianas, viviendo sus vidas, no molestando a nadie. Un agente de policía, llevando a cabo su labor con gran valentía", dijo , refiriéndose a las víctimas.
El ataque del lunes se produce una semana después del asesinato de ocho personas en tres negocios de masajes en el área de Atlanta. Fue al menos la séptima matanza masiva de este año en Estados Unidos. "Cuando aún ondea la bandera a media asta por esta tragedia, otra ciudad estadounidense se ha visto marcada por la violencia con armas de fuego", lamentó Biden.
El control de armas, a debate en el Senado
A raíz de los sucedido en Boulder, la Cámara Alta decidió celebrar una audiencia este mismo martes para evaluar la posibilidad de cambiar la legislación sobre el control de armas.
El senador republicano Ted Cruz, aprovechó su intervención durante la audiencia para advertir del "peligro" que supondría una legislación restrictiva. "Cuando desarmas a ciudadanos que cumplen con las leyes, haces que sea más posible que se conviertan en víctimas; si quieren actuar contra estos asesinatos, vayan tras los asesinos", afirmó.
Por contra, el senador demócrata Dick Durbin valoró la importancia de las muestras de respeto que se producen después de cada matanza, pero consideró que "además" es necesario pasar a la "acción". "Además de un momento de silencio, me gustaría pedir un momento de acción, un momento de preocupación real", dijo.
Es habitual que después de sucesos como el del lunes se avive el debate sobre el control de armas en el Congreso, sin embargo, casi todas las propuestas chocan con el muro de la mayoría cualificada; es decir, es necesario el apoyo de 60 de los cien senadores.
El expresidente Barack Obama ha comentado en diversas ocasiones que la mayor frustración de su mandato fue no lograr que el Congreso aprobara un un sistema de verificación de antecedentes de los compradores de armamento, en enero de 2016, una decisión que dejó al entonces mandatario literalmente en lágrimas.