La Comisión de Inteligencia del Senado estadounidense determinó que Rusia orquestó una agresiva campaña para apoyar la candidatura de Donald Trump en las elecciones del 2016, según el quinto y último informe de esa comisión publicada el martes.
El texto de más de 1.300 páginas indicó que Rusia usó al operador político republicano Paul Manafort, al sitio web WikiLeaks y a otros, como parte de sus esfuerzos por tratar de influir hace cuatro años.
El panel indicó que el informe es “la descripción más detallada hasta la fecha de las actividades de Rusia y la amenaza que éstas presentaron”.
La investigación, apoyada por legisladores de ambos partidos, se inició hace casi tres años y medio.
Un grupo de republicanos en la comisión redactó un anexo pidiendo que el documento diga explícitamente que la campaña de Trump no se coordinó con Rusia. Los demócratas incluyeron su propio anexo afirmando que el reporte demuestra claramente tal cooperación.
El fiscal especial Robert Mueller emitió el año pasado un reporte según el cual Rusia interfirió en la campaña mediante hackeos y las redes sociales. Mueller no llegó a acusar formalmente a ningún miembro de la campaña de conspirar con los rusos.
El reporte cuya divulgación culminó este martes, halló que el presidente Vladimir Putin dirigió personalmente los esfuerzos rusos para piratear redes y cuentas afiliadas al Partido Demócrata y filtrar información perjudicial para Clinton.
Rusia ha negado reiteradamente las acusaciones.