El gobierno de Estados Unidos acusó a una flota pesquera china que avanza por la costa pacífica sudamericana de llevar a cabo actividades sospechosas y peligrosas, y urgió al gobierno de Xi Jinping a imponer más restricciones a la actividad marina de su país en el exterior.
La flota, compuesta por 300 embarcaciones de bandera china, se encuentra ahora cerca de las costas peruanas y viaja en dirección a Chile, aseguraron dos funcionarios del Departamento de Estado de EE.UU. en una conferencia de prensa telefónica.
En su paso por Ecuador la flota navegó cerca de las Islas Galápagos, zona declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO, haciendo sonar las alarmas de organismos internacionales y del gobierno ecuatoriano.
EE.UU. expresó su preocupación respecto la comportamiento de la masiva flota, tanto porque pueden estar violando la soberanía de algunoos Estados —operando dentro de las zonas económicas exclusivas territoriales— como porque pueden estar incurriendo en actividades de pesca ilegal, no reportada y no regulada (IUU por sus siglas en inglés).
“Los sistemas automáticos de identificación de la mitad de las embarcaciones han sido desactivados por varias horas, días e incluso semanas (…) ¿Si están siguiendo las reglas, por qué un barco querría que su ubicación fuera desconocida?”, dijo el director adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, Jon Piechowski, en la llamada con periodistas.
En su paso por el archipiélago de Galápagos, la flota registró 73.000 horas de pesca en un mes, acumulando toneladas de peces y calamares y siendo responsable del 99% de la pesca visible cercana a las aguas de las islas, según un estudio del grupo para la conservación marítima Oceana.
“La flota china de pesca en aguas distantes ha estado regularmente implicada en el planeta en sobrepesca, pesca de especies de tiburones en vía de extinción, intrusión ilegal en jurisdicciones (…) y trabajo forzado. Es por esto que sospechamos de su comportamiento”, aseguró Piechowski.
El funcionario insistió en que EE.UU. está “presionando” a China para que imponga reglas más estrictas a su flota de pesca en aguas distantes y animó a los gobiernos locales a ejercer su soberanía en su aguas.
La Guardia Costera estadounidense colocó la pesca ilegal como la primera amenaza a la seguridad marítima global a mediados de septiembre, notando que si continúa su progresión llevará al deterioro de los estados costeros y aumentará tensiones entre naciones que dependen de la pesca, amenazando la estabilidad geopolítica.
Según Piechowski, la Guardia Costera de EE.UU. ha facilitado entrenamientos, equipos y fondos al gobierno ecuatoriano para lidiar con el paso de la flota china.
China es la nación del mundo con el peor índice de pesca IUU, según un ranking creado por la Iniciativa Global Contra el Crimen Organizado Transnacional.
Se estima que uno de cada cinco pescados en el mundo proviene de la pesca IUU, que ocasiona pérdidas de decenas de miles de millones de dólares para los pescadores legales en todo el mundo cada año y amenaza especialmente la subsistencia de los Pescadores artesanales, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).