La identidad gay del soldado Bradley Manning, destacada tras la publicación de una fotografía vestido de mujer, sería otro factor a tomar en cuenta en el juicio de sentencia que se encuentra en su etapa final.
Este lunes la jueza militar, coronel Denise Lind, escuchará los últimos alegatos, la recapitulación del caso en la que la defensa pide indulgencia en la sentencia tomando en cuenta la "disforia de género", la confusión sexual en que estaba inmerso el soldado acusado de filtrar información confidencial estadounidense al sitio web WikiLeaks.
Los abogados de la defensa presentaron testigos, quienes dijeron que el joven estuvo presionado por un gran estrés debido a su gran confusión de género dentro del ejército durante el periodo denominado “no pregunte, no diga” con respecto a la orientación sexual de los miembros del ejército.
La divulgación de la foto de Manning vestido de mujer, las cuales fueron enviadas a un superior en 2010, ayudarían a probar su confusión, que en términos psiquiátricos se conoce como disforia de género.
Durante las audiencias preliminares declaró el superior que no llevó el caso de Manning a otra instancia porque no lo consideró necesario ya que el soldado estaba recibiendo consejería.
Manning enfrenta una sentencia máxima de hasta 90 años de prisión por un total de 20 cargos que incluyen seis violaciones a la ley federal de espionaje.
La fiscalía presentó evidencia que la información filtrada por el soldado puso en grave riesgo a un gran número de estadounidenses que trabajan en el extranjero. Incluso, el Departamento de Estado tuvo que intervenir para reubicar a estas personas en otros países para protegerlos y garantizarles seguridad.
La semana pasada el soldado Manning pidió públicamente disculpas y reconoció que sus acciones causaron daño al país y que no podía cambiar lo que había hecho y sabía que tenía que pagar por sus acciones.
Este lunes la jueza militar, coronel Denise Lind, escuchará los últimos alegatos, la recapitulación del caso en la que la defensa pide indulgencia en la sentencia tomando en cuenta la "disforia de género", la confusión sexual en que estaba inmerso el soldado acusado de filtrar información confidencial estadounidense al sitio web WikiLeaks.
Los abogados de la defensa presentaron testigos, quienes dijeron que el joven estuvo presionado por un gran estrés debido a su gran confusión de género dentro del ejército durante el periodo denominado “no pregunte, no diga” con respecto a la orientación sexual de los miembros del ejército.
La divulgación de la foto de Manning vestido de mujer, las cuales fueron enviadas a un superior en 2010, ayudarían a probar su confusión, que en términos psiquiátricos se conoce como disforia de género.
Durante las audiencias preliminares declaró el superior que no llevó el caso de Manning a otra instancia porque no lo consideró necesario ya que el soldado estaba recibiendo consejería.
Manning enfrenta una sentencia máxima de hasta 90 años de prisión por un total de 20 cargos que incluyen seis violaciones a la ley federal de espionaje.
La fiscalía presentó evidencia que la información filtrada por el soldado puso en grave riesgo a un gran número de estadounidenses que trabajan en el extranjero. Incluso, el Departamento de Estado tuvo que intervenir para reubicar a estas personas en otros países para protegerlos y garantizarles seguridad.
La semana pasada el soldado Manning pidió públicamente disculpas y reconoció que sus acciones causaron daño al país y que no podía cambiar lo que había hecho y sabía que tenía que pagar por sus acciones.