El alguacil de San Francisco, Ross Mirkarimi, ha defendido la decisión de su oficina de liberar a un mexicano que se encontraba ilegalmente en Estados Unidos y que ahora es sospechoso de asesinar a una mujer en un muelle turístico.
Mirkarimi dijo que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) debería haber emitido previamente una orden de arresto para Francisco Sánchez.
"El ICE sabía que lo habían deportado cinco veces", dijo Mirkarimi. "Uno diría que había llegado a un nivel que requería una orden judicial. No lo hicieron" indicó.
Los fiscales acusaron a Sánchez del asesinato de Kathryn Steinle, muerta a tiros el miércoles pasado en el concurrido Muelle 14 donde paseaba con su padre.
Tras el asesinato de Steinle llovieron las críticas sobre esa ciudad porque Sánchez había sido deportado reiteradamente y estaba en libertad porque las autoridades locales desoyeron un pedido de las autoridades migratorias de retenerlo en la cárcel.
San Francisco, junto con decenas de municipios en todo el país, no coopera plenamente con las autoridades federales de inmigración. La ciudad incluso se jacta de ser un "santuario" para la gente que se encuentra en el país ilegalmente.
Entre tanto, en su más reciente comentario sobre la política de inmigración de Estados Unidos, Donald Trump, el candidato presidencial republicano, dijo que el asesinato de la joven Steinle en San Francisco era más prueba de que el país tiene que hacer cumplir el control de la frontera.
“Esto es meramente uno de miles de incidentes similares en todo Estados Unidos” dijo Trump. “En otras palabras, los peores elementos en México están siendo empujados hacia Estados Unidos por el gobierno mexicano” indicó Turmp en su declaración.
En la declaración Trump indica que “Muchas fabulosas personas vienen de México legalmente y nuestro país es mejor por eso”. Agrega que “Estoy orgulloso de decir que conozco muchos mexicanos que trabajan duro, muchos de los cuales están trabajando para mí… y como nuestro país, mi organización es mejor por eso”.
