A medida que se aproxima el plazo para concretar la reducción del enorme déficit fiscal de Estados Unidos, los legisladores de ambos partidos parecen estar cediendo en sus rígidas posiciones ideológicas, con la esperanza de lograr un acuerdo bipartidista que ponga al país en un camino fiscal más sólido.
Los economistas están amplimamente de acuerdo en que el gobierno estadounidense debe gastar menos y recaudar más impuestos para superar el déficit de $1 billón de dólares antes de que el super comité bipartidista del Congreso recorte $1,2 billones del déficit en la próxima década.
Sin embargo, la mayoría de los republicanos se oponen a considerar un aumento en los impuestos y la mayoría de los demócratas se oponen a profundos recortes de gastos a programas que benefician a los pobres y a los ancianos.
El resultado ha sido un estancamiento en las negociones en un Congreso dividido políticamente, donde ningún partido puede imponer su voluntad y donde los acuerdos son la única forma de aprobar leyes.
El legislador Mike Simpson, de Idaho, es uno, entre decenas de republicanos, que ahora reconoce la necesidad de mayores ingresos impositivos. “La realidad es que no se pueden lograr generar $4 billones de dólares sin incluir ingresos adicionales. Más ingresos son fundamentales para esto”, reconoció.
Al hablar en el programa Fox News Sunday, Simpson coincidió en la flexibilización de su posición con el legislador demócrata Heath Shuler, de Carolina del Norte, quien dijo que su partido estaría dispuesto a aceptar recortes al gasto en función de asegurar la solvencia del país.
“Para salvar estos programas, tenemos que asegurarnos que tengan recursos a largo plazo que sean más sostenibles, pero también deshacernos del fraude y el abuso que ha habido en los programas por algún tiempo”, dijo Shuler.
El super comité del déficit tiene hasta el 23 de noviembre de 2011 para encontrar formas de recortar el déficit en un mínimo de $1,2 billones de dólares. Si no se logra un acuerdo para ese plazo, comenzarán a aplicarse recortes automáticos que entrarán en efecto el próximo año 2012.