El secretario de Defensa de Estados Unidos, Chuck Hagel, dice que los ataques aéreos contra militantes del grupo Estado islámico se intensificarán en el futuro mientras fuerzas terrestres iraquíes trabajan para ser más efectivas.
La idea, dijo Hagel es “sostener esta presión contra el grupo Estado islámico ayudará a proveer tiempo y espacio para que Irak reconstruya sus fuerzas y continúe con la ofensiva”.
“Mientras las fuerzas iraquíes se fortalecen, el ritmo e intensidad de la campaña aérea de nuestra coalición se acelerará”, agregó.
Hagel formuló los comentarios en una comisión del Congreso estadounidense, donde indicó que el pueblo estadounidense debe prepararse para una larga lucha.
El jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Martin Dempsey, agregó que la estabilidad política de Irak también será un factor en la lucha contra el grupo Estado islámico.
“Principalmente, no sabemos hasta qué grado el nuevo gobierno de Irak podrá convencer a los kurdos y a los sunitas que tiene la intención de tener un gobierno de unidad nacional”, dijo.
El general Dempsey agregó que es posible que en algún momento en el futuro las autoridades estadounidenses consideren asignar un modesto número de tropas estadounidenses a luchar con las fuerzas iraquíes en la norteña ciudad de Mosul y en otras partes.
El testimonio surge días después que el presidente Barack Obama autorizara que las fuerzas armadas desplieguen hasta 1.500 soldados para operaciones de no combate en Irak.
