![Arauquita, municipio colombiano ubicado en el departamento de Arauca, el lugar donde tuvo lugar el secuestro del sargento Bravo el pasado 14 de febrero. [Foto: Federico Buelvas, VOA].](https://gdb.voanews.com/01000000-0aff-0242-b5c4-08db1399880b_w250_r1_s.png)
El Ejército de Liberación Nacional (ELN) secuestró hace una semana al sargento colombiano Libey Danilo Bravo, en el departamento de Arauca y fronterizo con Venezuela; la confirmación de su retención se da en medio del segundo ciclo de negociaciones entre el grupo armado y el Estado colombiano, un proceso que muchos esperan pueda superar este "momento de controversia".
Ya el domingo, el presidente Gustavo Petro, condenó el secuestro desde su cuenta de Twitter y lo calificó como un “sabotaje a cualquier posibilidad de paz”.
“Condeno el secuestro del sargento Libey Danilo Bravo del Ejército Nacional. Estos son hechos que sabotean cualquier posibilidad de paz. Estos hechos de violencia contra la Fuerza Pública y los que día a día padecen las comunidades no pueden tener cabida en nuestra sociedad”, escribió en Twitter el presidente colombiano.
Por su parte, el Frente de Guerra Oriental del ELN, que opera en el departamento de Arauca, dijo en un comunicado que “en los próximos días entregarán pruebas de supervivencia del militar”.
El defensor del Pueblo de Colombia, Carlos Camargo, ha dicho que en el departamento de Arauca, los grupos armados tienen a por lo menos 12 personas en su poder y se ofreció como facilitador para su liberación.
“Desde la Defensoría del Pueblo solicitamos que se respete la vida e integridad física de las personas que están secuestradas o desaparecidas en Arauca. Ofrecemos nuestros canales humanitarios que permitan el regreso a sus hogares de las personas reportadas como desaparecidas o en poder de los grupos armados ilegales en ese departamento”, apuntó el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, en un comunicado emitido el lunes.
Como en toda negociación, hay momentos de controversia, de discusión, pero los trabajos continúan de manera normal”Iván Cepeda, senador de Colombia
Desde México, la sede de la negociación de paz entre el Gobierno de Colombia y el ELN, el senador oficialista Iván Cepeda y miembro de la delegación de paz, aseguró que la retención del militar no representa ningún riesgo de suspensión de los diálogos.
“No hay fundamento para rumores o especulaciones sobre la suspensión de los diálogos. Como en toda negociación, hay momentos de controversia, de discusión, pero los trabajos continúan de manera normal”, le dijo a la VOA Iván Cepeda.
En la otra orilla, la senadora opositora y miembro del Centro Democrático, el principal partido de oposición en Colombia, María Fernanda Cabal, señaló que el proceso de paz es “complaciente” con el ELN.
“Rechazamos el secuestro del soldado Libey Danilo Bravo en Arauca, pero esto no es otra cosa que la consecuencia de ser complacientes con el terrorismo. Así no se negocia, con un Estado débil, con unas Fuerzas Militares amarradas y con el país inundado coca”, comentó a la Voz de América la senadora Cabal.
Para el politólogo Andrés Nieto, al ELN le falta voluntad de Paz para concretar este proceso.
“Para cualquier proceso de paz es fundamental la voluntad de las partes y esto pasa no solo por un cese acordado, sino también por las disminuciones criminales y las rentas delincuenciales, precisamente como el secuestro, la extorsión, las amenazas y demás”, explicó a la Voz de América Andrés Nieto.
El ELN es la última guerrilla activa en Colombia, con la que ocho presidentes en el país sudamericano han intentado lograr un acuerdo de paz, incluidos el presidente Gustavo Petro, que busca a través de la llamada “paz total” llegar a un acuerdo final con este grupo armado.
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