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De los guantes de la primera dama a máscaras faciales: una pequeña empresa sobrevive a la pandemia


La primera dama de EE. UU., Jill Biden, abraza a su esposo, Joe Biden, el día de la investidura de éste como 46º presidente de la nación, el 20 de enero de 2021. Jill Biden viste guantes fabricados por Wing+Weft Gloves.
La primera dama de EE. UU., Jill Biden, abraza a su esposo, Joe Biden, el día de la investidura de éste como 46º presidente de la nación, el 20 de enero de 2021. Jill Biden viste guantes fabricados por Wing+Weft Gloves.

Wing + Weft Gloves ha fabricado guantes delgados y livianos durante casi un siglo, además de trabajar para las primeras damas también ha hecho guantes para la mayoría de obras de teatro y musicales de Manhattan. Pero la pandemia les obligó a reinventarse.

Una fábrica de guantes en la ciudad de Nueva York llamada Wing + Weft Gloves ha tenido una conexión única con Washington DC durante décadas. Pero cuando estalló la crisis del coronavirus, esta pequeña empresa propiedad de mujeres tuvo que reinventarse.

Los guantes son un detalle, un pequeño accesorio, no tan necesario, pero muy elegante. Puede que los guantes no sean imprescindibles en estos días, pero brindan un aspecto más refinado, solo hay que preguntar a personajes como Lady Gaga, Britney Spears, Paris Hilton o Michelle Obama.

La primera dama de EE. UU. Jill Biden y su esposo, el presidente Joe Biden, observan los fuegos artificiales en Washington DC, el día de la toma de posesión del mandatario, el 20 de enero de 2021. Jill Biden usa guantes de piel de Wing + Weft Gloves.
La primera dama de EE. UU. Jill Biden y su esposo, el presidente Joe Biden, observan los fuegos artificiales en Washington DC, el día de la toma de posesión del mandatario, el 20 de enero de 2021. Jill Biden usa guantes de piel de Wing + Weft Gloves.

Para todas esas mujeres, y miles de otras, Wing + Weft Gloves ha fabricado guantes delgados y livianos durante casi un siglo. Katie Sue Nicklos es la dueña de esta pequeña empresa cuyas empleadas son todas mujeres.

La empresaria, conversa con la Voz de América, mientras junto a su gata Silvie, supervisa el proceso de trabajo y vigila el patrón de guantes de la primera dama. “Jill Biden, la doctora Biden, usó nuestros guantes para la investidura. ¡Los usó en tres atuendos separados!", dice con orgullo Nicklos, sobre los guantes de color turquesa, blanco y morado que usó Biden el día de la toma de posesión presidencial.

Rememora que los diseñadores de la entonces futura primera dama le trajeron las medidas de las manos de Biden y discutieron el estilo de los guantes y el material. Lo mismo que hacen con todos los clientes.

"Era la única piel que tenía, así que esos son colores particulares para sus guantes", dice Nicklos.

Su tienda está ubicada en el distrito de la confección de la ciudad de Nueva York, que alguna vez fue el centro de la industria de la moda de Estados Unidos. Con el tiempo, los oficinistas expulsaron a los sastres. Hoy, Wing + Weft Gloves es la única tienda de fabricación de guantes que queda en el área.

La empresaria asegura que "cada primera dama desde Jackie Kennedy" ha usado sus guantes y "no necesariamente por la investidura".

El tercer juego de guantes que usó la primera dama de EE. UU. Jill Biden, el día de la investidura presidencial de su esposo Joe Biden, fueron los de color morado que se aprecian en la foto durante un evento en el monumento a Lincoln.
El tercer juego de guantes que usó la primera dama de EE. UU. Jill Biden, el día de la investidura presidencial de su esposo Joe Biden, fueron los de color morado que se aprecian en la foto durante un evento en el monumento a Lincoln.

En el acogedor espacio donde funcionan la fábrica y la tienda, se hacen los guantes para la mayoría de las obras de teatro y musicales de Manhattan, así como para las películas. Pero, Nicklos dice que ha habido poco trabajo desde que Broadway se puso en pausa indefinida en marzo de 2020.

“Pensamos que solo nos llevaría una o dos semanas volver a ponernos en marcha. Creo que alrededor de la tercera semana, fue entonces cuando supe que las cosas no iban a volver a la normalidad", recuerda con tristeza.

Los guantes de teatro dieron paso a las mascarillas médicas cuando las costureras empezaron a trabajar desde casa. Junto con otras tiendas, Nicklos ha tratado de mantener ocupados a sus empleados hasta que reabra Broadway.

“Fabricantes de guantes, sombrereros, bordadores, plisadores, gente que vende ropa interior… Todos nos conglomeramos para formar esta coalición”, asegura la empresaria.

Recientemente, la tienda comenzó a producir guantes con revestimiento antibacteriano. Para Nicklos y sus empleados, es importante mantenerse a salvo durante la pandemia, pero también hacerlo con estilo.

"Un guante muy bonito y algo que la gente pueda usar una y otra vez, ¡y lavarse! [que sirva] para pantalla táctil y todo, listo para ser lanzado a la lavadora", explica ella sobre los nuevos guantes que usan materiales que en su mayoría son plástico reciclado, en un guiño al enfoque moderno sobre el ambientalismo.

Pero como dice Nicklos, aún así hay espacio para la elegancia sencilla. “¡Son fabulosos! Todo el mundo los quiere siempre, ¡pero son míos!", concluye con orgullo.

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