Daniel del Valle nació con talento, y lo comprobó a muy temprana edad. A los 7 años comenzó aprendiendo a tocar el piano y a desarrollar su talento artístico musical y desde entonces, su carrera lo ha llevado a actuar ante monarcas y otras personalidades.
En las fotos publicadas en su perfil profesional en Facebook, se le puede ver al lado del Rey de España, y junto a otros líderes mundiales y cantantes reconocidos como Alejandro Sanz.
“Yo he tenido la suerte que desde un principio fui el solista, menudo orgullo, cantar para reyes, para presidentes”, dijo el joven madrileño, de 18 de edad, a la Voz de América.
Además de sus dotes artísticas, del Valle tiene un compromiso con causas sociales como la de Venezuela, una nación en crisis a la que dedica parte de sus esfuerzos.
El tenor forma parte del Coro Real de España, con el que ha recorrido el mundo y actuado en escenarios y teatros prestigiosos como el Teatro Real de Madrid, el Auditorio Nacional de España, el Moscow International House of Music, Symphony Orchestra Concert Hall de Shanghái, y el Lichi Grand Theatre en Nanjing.
Tal vez por eso tiene además un profundo respeto a la vida e interés por temas sociales. Un ejemplo de ello, es que desde hace algunos años funge como embajador de la organización no gubernamental “Una medicina para Venezuela”, con la cual ha realizado varios proyectos para ayudar a comunidades de este país.
“Comencé a recolectar medicinas en algunos eventos, concierto y a difundir lo que hace esta fundación en mis redes sociales, ayudar a enviarlas y pues informar a las personas que no es tan difícil ayudar y salvar vidas, realmente", explicó sobre su activismo.
El tenor asegura que saber que con su labor como embajador de esta fundación ayuda a salvar vidas en Venezuela, un país en el que conseguir medicinas es muy difícil, lo llena de mucha satisfacción.
"Es algo bien fuerte, cuando te llegan mensajes al WhatsApp que dicen que con tu ayuda pudieron salvar o ayudar a 27 familias, es muy fuerte y se te salen las lágrimas, porque el saber el poco valor que tiene la vida ahí, eso llega a mi corazón, y es lo que me motiva día a día para seguir ayudando con todo lo que este en mis manos”, contó el tenor a la VOA.
Pero el lado humanitario de del Valle le ha llevado también a formar parte de otros proyectos y campañas sociales, como la campaña “Todos somos migrantes”, de la Fundación Panamericana para el Desarrollo y la Organización de los Estados Americanos.
"Aquí (España) hubo un caso de xenofobia en un programa de televisión, del que yo hablé en mis redes sociales, y después de eso, el cantante Ricardo Montaner vio mi comentario y mandó a su manager a que me escribiera, que estaba sorprendido de que un joven de mi edad escribiera sobre eso y pues después me mandaron un comunicado oficial de la OEA para unirme a la campaña y pues creo que esto va más allá de la ideología, esto se trata de vidas humanas", asegura el cantante.
Daniel defiende la postura de que los inmigrantes salen de sus países porque quieren cumplir sueños, buscar algo mejor para ellos y sus seres queridos.
"Esto no es un tema político, desde los países de África que vienen a Europa o los centroamericanos que buscan otras oportunidades, tienes que ponerte en los zapatos de otros para saber cómo se sienten y así actuarás de una manera u otra", dijo del Valle.
"Cruzando el charco de América"
En el aspecto musical, este joven se está enfocando en su carrera como solista, y recientemente grabó una canción llamada "Color", que grabó en dúo con la cantante ecuatoriana, Dayanara.
"Es una colaboración, ahora sí que cruzando el charco de América, conozco a mucha gente, me enorgullece muchísimo”, dijo el tenor, sobre este tema que fue inspirado netamente en el amor y lleva "suaves tonalidades a cada una de las situaciones que vivimos día a día con esa persona especial que roba nuestro corazón", agregó.
Daniel del Valle asegura que vive bajo el lema: "soñar alto para llegar lejos", pensar de esa manera es lo que lo ha impulsado durante mucho tiempo y es lo que lo mantiene con la mente y los pies fijos en sus metas y en conexión con su parte humanitaria.
[Adaptación: Herbert Zepeda]
