Música de coro, de órgano y una sinfonía de Mozart engalanaron el rezo vespertino que presidió el papa Francisco el jueves por la tarde en la Catedral de San Patricio, en Manhattan, Nueva York.
Unas 2.500 personas aplaudieron a Pontífice a su entrada al templo, que luego quedó en silencio al comenzar el servicio.
El Papa pronunció la homilía en español, comenzando con la inclusión de otras religiones, incluidos los hermanos y hermanas islámicos, y hablando de la humildad y el sacrificio y de la importancia de servir a los pobres. También habló del recuerdo y la gratitud, los dos pilares de la iglesia.
Francisco habló además del escándalo de abuso sexual, de la importancia de la mujer en la Iglesia y agradeció al pueblo estadounidense, instando a todos a seguir al Dios, Santo Padre y a su hijo Jesucristo.
Sus palabras sobre la importancia del sacrificio y el trabajo arduo fueron recibidas con una fuerte ovación.
El cardenal Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York, dio la bienvenida al Papa y lo declaró neoyorquino. Dijo que el Papa ya tenía un hogar en sus corazones, luego mencionó a Dorothy Day y Thomas Merton, conocidos cristianos, a quien el Papa nombró en Washington horas antes.
Después del servicio, el Papa caminó entre los asistentes y habló con ellos, dándoles la mano y sonriendo. La caravana viajó después por la Quinta Avenida hasta la residencia donde pasará la noche en la zona conocida como Upper East Side.
El viernes, el Papa de 78 años, tiene otra jornada agotadora, comenzando por su discurso a líderes mundiales en la Asamblea General de las Naciones Unidas, que se espera se enfoque en el cambio climático, la migración y la inmigración, luego un servicio multireligioso en el Memorial Nacional del 11 de Septiembre en la Zona Cero, visitará una escuela de estudiantes mayormente hispanos y negros en East Harlem, y por la noche celebrará misa en el Madison Square Garden ante una multitud de unas 20.000 personas.
El Papa partirá el sábado por la mañana a Filadelfia para los dos días finales de su visita a Estados Unidos. Allí presidirá la Reunión Mundial de Familias, patrocinada por el Vaticano. El domingo, celebrará una misa al aire libre que se anticipa atraerá a unos 2 millones de personas.
