La congresista de EE.UU. por Florida Ileana Ros-Lehtinen dijo que considera un “honor” ser atacada por "líderes represivos" y puntualizó que el presidente venezolano, Hugo Chávez, se equivoca porque no logrará intimidarla.
“Están acostumbrados a intimidar a sus pueblos y calculan que pueden intimidarme y silenciarme'', declaró Ros-Lehtinen, quien dijo que no hay mejor halago para quienes defienden las libertades que ser criticados por los que atentan contra ellas.
Ros-Lehtinen puntualizó que los ataques de Chávez le “sirven de estímulo para mantener los esfuerzos del gobierno de EE.UU. en pro de los derechos humanos y las libertades democráticas para el pueblo venezolano, y todos los que sufren bajo líderes dictatoriales y represivos".
La congresista cubanoamericana, que a partir de enero ocuparía la presidencia del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes en Washington, respondió así a recientes insultos del presidente venezolano durante un evento en Caracas denominado “en defensa de la soberanía y contra el imperialismo”.
Sin mencionar su nombre, Chávez dijo entonces que "esta señora fascista podría ser pedida en extradición por un tribunal venezolano por estar cometiendo delitos y conspirando contra la soberanía de nuestro país".
De esta manera el mandatario venezolano reacciónó a comentarios previos de la legisladora estadounidense, que calificó de “peligroso” el comportamiento antidemocrático de los presidentes de Venezuela, Bolivia, Nicaragua y de otros países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA).
Según Ros-Lehtinen, la propia reacción del gobernante venezolano es una muestra adicional de sus inclinaciones autoritarias.
"Estos ataques sirven para destacar la gran diferencia entre la política de EE.UU. de total compromiso con la libertad, y la de Chávez y sus camaradas del ALBA, que está basada en la represión e intimidación'', dijo.
