Una familia promedio de EE.UU. que ingresa al año entre $40 mil y $64 mil dólares podría ver subir el año próximo en $2 mil dólares sus impuestos si los legisladores no renuevan las exenciones tributarias que expiran a fines de 2012, destaca un informe difundido este lunes en Washington.
Un estudio del Centro para Políticas Tributarias dice que los contribuyentes en general se verían afectados de no actuar el Congreso, desde los hogares que ingresan entre $110 mil y $140 mil al año, con un aumento de $6 mil en impuestos, hasta los más ricos (el uno por ciento de la población), con incrementos impositivos de más de $120 mil dólares.
Las exenciones que expirarían con el año comprenden recortes de gravámenes sobre los salarios e ingresos por inversiones, así como rebajas a familias con hijos, adoptados durante el mandato de George W.Bush. También dejaría de estar en efecto el 2 por ciento de reducción temporal sobre las nóminas impulsado por el presidente Barack Obama.
De acuerdo con el estudio, si ninguna de esas exenciones se renueva, el gobierno sumaría ingresos ascendentes a más de $500 mil millones de dólares, una cantidad más que considerable.
Economistas han pronosticado que si el Congreso no actúa, los potenciales incrementos tributarios combinados con el recorte automático de gastos del gobierno de $109 mil millones previsto para que entre en efecto en enero entrante podrían lanzar la frágil economía de vuelta a una recesión.
"El precipicio fiscal amenaza con un incremento sin precedentes de los impuestos al final del año (…) como promedio casi $3 mil 500 dólares por hogar, puesto que se acabarían casi todas las exenciones tributarias en vigor desde 2001”, subraya el informe.
Un estudio del Centro para Políticas Tributarias dice que los contribuyentes en general se verían afectados de no actuar el Congreso, desde los hogares que ingresan entre $110 mil y $140 mil al año, con un aumento de $6 mil en impuestos, hasta los más ricos (el uno por ciento de la población), con incrementos impositivos de más de $120 mil dólares.
Las exenciones que expirarían con el año comprenden recortes de gravámenes sobre los salarios e ingresos por inversiones, así como rebajas a familias con hijos, adoptados durante el mandato de George W.Bush. También dejaría de estar en efecto el 2 por ciento de reducción temporal sobre las nóminas impulsado por el presidente Barack Obama.
De acuerdo con el estudio, si ninguna de esas exenciones se renueva, el gobierno sumaría ingresos ascendentes a más de $500 mil millones de dólares, una cantidad más que considerable.
Economistas han pronosticado que si el Congreso no actúa, los potenciales incrementos tributarios combinados con el recorte automático de gastos del gobierno de $109 mil millones previsto para que entre en efecto en enero entrante podrían lanzar la frágil economía de vuelta a una recesión.
"El precipicio fiscal amenaza con un incremento sin precedentes de los impuestos al final del año (…) como promedio casi $3 mil 500 dólares por hogar, puesto que se acabarían casi todas las exenciones tributarias en vigor desde 2001”, subraya el informe.
