El presidente Donald Trump proporcionó a la oficina del fiscal especial respuestas escritas a sus preguntas sobre su conocimiento de la interferencia de Rusia en las elecciones de 2016, dijeron sus abogados el martes, lo que se convierte en la primera vez que Trump ha cooperado directamente con la investigación.
El paso es un hito en una negociación de un mes de duración entre los abogados de Trump y el equipo del fiscal especial, Robert Mueller, sobre si el presidente se sentará para dar una entrevista y cuándo.
"El presidente respondió hoy las preguntas escritas enviadas por la oficina del fiscal especial", dijo el abogado Jay Sekulow en una declaración. "Las preguntas presentadas trataron asuntos relacionados con los temas de la investigación vinculados con Rusia. El presidente respondió por escrito".
Sekulow señaló en un mensaje de seguimiento que el equipo legal no entregaría copias de las preguntas y respuestas ni discutiría la correspondencia con la oficina del fiscal especial.
Se trata de la primera vez que el presidente describe a los investigadores su conocimiento sobre los momentos claves que están bajo escrutinio por parte de los fiscales. Si Mueller encuentra que las respuestas son satisfactorias, estas también pueden ayudar a evitar una posible lucha de citaciones para que Trump rinda testimonio.
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El resultado de compromiso, que duró casi un año en proceso, ofrece algunos beneficios a ambas partes. Trump evita, al menos por ahora, una reunión potencialmente peligrosa e impredecible con los fiscales, mientras que Mueller asegura un conjunto de declaraciones en el registro. Se espera que el presidente y sus abogados mantengan la precisión de las declaraciones mientras dure la investigación.
El equipo de Mueller puede presionar para obtener información adicional.
Hace meses, los investigadores presentaron al equipo legal de Trump docenas de preguntas que querían hacerle al presidente sobre si su campaña se coordinó con el Kremlin para inclinar la elección de 2016 y si intentó obstruir criminalmente la investigación de Rusia mediante acciones como el despido del ex director del FBI James Comey.
La oficina de Mueller acordó aceptar respuestas por escrito a preguntas sobre la posible colusión rusa y presentó, por el momento, consultas relacionadas con la supuesta obstrucción.
Dejaron abierta la posibilidad de seguir con preguntas adicionales sobre el caso, aunque los abogados de Trump, -quienes durante mucho tiempo se han resistido a cualquier entrevista cara a cara- habían estado especialmente convencidos de que la Constitución lo protegía de tener que responder cualquier pregunta sobre acciones que tomó como presidente.
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