El día que Estados Unidos superó a China con la mayoría de los casos de COVID-19 de cualquier país y las solicitudes de desempleo alcanzaron un récord, el presidente Donald Trump se mantuvo públicamente optimista sobre el curso de la pandemia y los estragos que está causando.
"Cómo ha cambiado el mundo, pero va a terminar mejor que nunca", dijo el presidente al comienzo de la conferencia de prensa del jueves del grupo de trabajo sobre coronavirus de la Casa Blanca. "Relájense. Quédense en casa. Estamos progresando mucho", dijo.
Señaló que la próxima semana se hará un anuncio sobre la posibilidad de relajar las pautas del gobierno a la nación sobre el distanciamiento social y otras medidas; y sugirió que grandes sectores del país que no están gravemente afectados por el coronavirus podrían reabrirse a la reanudación del comercio regular.
En una carta dirigida a los gobernadores, este jueves, Trump dijo que su administración está revisando las pautas de distanciamiento social y busca calificar los más de 3.000 condados del país como de alto, mediano o bajo riesgo.
Cooperación con el G20
El presidente Trump también habló en su conferencia de prensa sobre la reunión virtual sostenida este jueves con líderes del G20.
Trump agradeció haber conversado con varios de los mandatarios, entre ellos el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, de quien dijo ha hecho un gran esfuerzo en el posicionamiento de unos 27.000 soldados en la frontera con EE.UU. para contener la inmigración.
Señaló que en la reunión con los líderes del G20, acordaron una mayor cooperación, compartiendo información sobre la pandemia del coronavirus.
Buque hospital viaja a Nueva York
El presidente anunció que el buque-hospital Confort, con excelentes condiciones técnicas y equipamiento médico, zarpará de una base en Virginia el sábado y tiene previsto llegar a la ciudad de Nueva York el lunes –y no en tres semanas como se había previsto.
Trump dijo que visitará Norfolk, Virginia, el sábado para ver la partida del buque hospital.
Sobre posible repunte económico
"Creo que va a suceder bastante rápido", dijo el presidente, mientras los epidemiólogos advierten que muchas áreas de Estados Unidos aún no han sido expuestas a toda la fuerza del virus.
Trump insistió que los estadounidenses que puedan volverán al trabajo, porque el país necesita volver a trabajar, aunque precisó, será una decisión que se tome según las circunstancias.
El presidente precisó que las personas deben de regresar "manteniendo las distancias, lavándose las manos y no estrechando manos". "Creo que va a pasar muy pronto", auguró.
El regreso a la vida laboral normal país, sugirió Trump: "Quizá vamos a hacerlo por secciones del país que no están tan afectadas".
En respuesta a pregunta de una reportera en la Casa Blanca, Trump confirmó que unos 3,3 millones de estadounidenses están desempleados debido a la crisis del coronavirus.
Se espera que la Cámara apruebe fácilmente el viernes el paquete de ayuda económica de $ 2 billones aprobado el miércoles por el Senado sin votos discrepantes, un raro acuerdo bipartidista en una era de profunda división política en el país.
Eso subrayó la devastación que la enfermedad está causando en la economía y las familias estadounidenses con la mayoría de las empresas se detuvieron en medio del distanciamiento social para tratar de frenar la propagación del coronavirus.
Venezuela
A raíz del anuncio hoy de una recompensa de 15 millones de dólares por información que lleve a la captura del presidente en disputa de Venezuela, Nicolás Maduro y algunos altos cargos de su gobierno, el presidente Trump no respondió directamente a una pregunta de los periodistas sino que habló sobre la actual política de su gobierno hacia el país latinoamericano.
Hay más de 82,000 casos de COVID-19 en los Estados Unidos con casi 1,200 muertes confirmadas.
Un análisis realizado por el Washington Post de las primeras 1,000 muertes en los Estados Unidos revela que alrededor del 65% de las personas que han muerto por el COVID-19 tenían más de 70 años y casi el 40% tenían más de 80. Solo alrededor del 5% de los fallecidos tenían 40 años o menos, pero muchos más en ese grupo de edad han estado lo suficientemente enfermos como para ser hospitalizados. Casi el 60% de los que han sucumbido eran hombres.
Científicos del Instituto de Medición y Evaluación de la Salud de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington predicen que el país verá, en los próximos cuatro meses, más de 81,000 muertes por el coronavirus.
A nivel mundial, el número total de personas que se sabe que están infectadas con la enfermedad ha superado los 500,000, y muchos epidemiólogos advierten que es probable que el número de casos a nivel mundial se expanda significativamente durante el próximo año a 18 meses.
(Con información de Bricio Segovia/ Voa Noticias)