El gobierno de Canadá se ha acercado a los cónsules de las naciones centroamericanas cuyos ciudadanos han sido afectados por el retiro del Estatus de Protección Temporal (TPS) en Estados Unidos para informarles que está abierto a recibir solicitudes a asilo, pero bajo ciertas condiciones para que se haga de una forma ordenada.
El cónsul de Nicaragua en Miami, Luis Martínez, dijo en entrevista al canal nicaraguense 100% Noticias, que el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, está enviando un emisario del parlamento de su país para que se reúna con la comunidad y los cónsules de Centroamérica.
El parlamentario Randy Boissonnault llegará el domingo 19 de noviembre para la reunión en Miami.
El cónsul Martínez enfatizó que la iniciativa provino del gobierno canadiense, el cual -en su opinión- trata de evitar una ola migratoria desordenada como la que ocurrió hace nueve meses cuando Estados Unidos suspendió el TPS para los haitianos.
Según el estimado del diplomático, entre 25.000 y 30.000 haitianos que quedaron desprotegidos cruzaron la frontera hacia Canadá, causando a la nación un problema imprevisto.
Estados Unidos anunció hace poco el fin del TPS para los nicaraguenses y extendió por un plazo de seis meses el amparo a los hondureños. El TPS de los salvadoreños vence en marzo de 2018 y el gobierno Trump aún no ha anunciado si lo extenderá.
El Cónsul nicaraguense calcula que la decisión afecta a unos 450.000 centroamericanos, y cree que Canadá teme "se le pudieran ir a la frontera", y para evitarlo decidieron "abrir esta esperanza para que de una forma ordenada puedan aplicar ellos para un asilo".
El parlamentario canadiense que se reunirá con los cónsules centroamericanos explicará quiénes podrán solicitar el asilo y cómo lo pueden hacer, dijo Martínez.
Nicaragüenses en EE.UU.
El diplomático señaló que ningún ciudadano de su país, de los 5.200 que estima estaban amparados por el TPS originalmente, se ha acercado al consulado a pedir ayuda tras el anuncio de EE.UU. sobre la suspensión del programa.
Explicó que su país no tiene una estadística que permita decir cuántos son los afectados directamente en este momento, ni cuántos han cambiado su estatus en los 19 años desde que EE.UU. ofreció el estatus de protección temporal a los nicaraguenses.
El cónsul Martínez hizo un llamado a sus conciudadanos que residen en EE.UU. sin protección legal tras la suspensión del TPS, a que se acerquen a cualquiera de los cinco consulados de Nicaragua para determinar "realmente cuántos... están en este problema".
Los nicaraguenses desprotegidos tienen plazo hasta el 5 de enero de 2019 para arreglar su situación legal en Estados Unidos.
Estas personas, explicó el cónsul, se dividen en dos grupos: los que ingresaron a EE.UU. y se quedaron sin arreglar su situación legal y no recibieron carta de deportación (por no haber sido detectados), y luego un grupo que se estima en un 60%, que recibieron carta de deportación y pueden ser repatriados a Nicaragua en cualquier momento.