El Salvador lamentó que Estados Unidos haya suspendido una reunión de cancilleres y funcionarios de seguridad de los países del Triángulo Norte de Centroamérica para discutir temas de cooperación y expresó su disposición para asistir a una nueva convocatoria.
Según un comunicado emitido el domingo por la presidencia de El Salvador, el gobierno estadounidense les comunicó el viernes la decisión de suspender la reunión con los representantes de Guatemala, Honduras y El Salvador, el mismo día que el Departamento de Estado convocó a sus diplomáticos de Republica Dominicana, Panamá y El Salvador, después de que esas naciones decidieron suspender sus vínculos con Taiwán para establecer relaciones diplomáticas con China.
Esos países han dicho que su decisión reflejaba simples realidades económicas: China, grande y de rápido crecimiento, ha gastado miles de millones para construir puertos, líneas ferroviarias y otros proyectos en toda América Latina.
Por su parte el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, pidió el domingo a Estados Unidos que respete la soberanía de su país.
"Respetamos las decisiones soberanas de otros países y siempre pediremos el mismo respeto por la nuestra", dijo Varela en un comunicado.
Estados Unidos ha otorgado ayudas millonarias a los países del Triángulo Norte para llevar a cabo acciones de reducción de la pobreza, fortalecimiento institucional y mejorar la seguridad ciudadana y el acceso a la justicia, para mejorar las condiciones de vida de las personas y promover el arraigo en sus comunidades y evitar la emigración a suelo estadounidense.
El gobierno salvadoreño aseguró que la Alianza para la Prosperidad ha sido desde el inicio una prioridad para el presidente Salvador Sánchez Cerén y señaló que El Salvador ha puesto 7,41 dólares por cada uno aprobado por el gobierno de Estados Unidos para los programas de desarrollo y seguridad y destacó que el país ha sido certificado en cuanto al cumplimiento de requisitos establecidos por el Congreso estadounidense para recibir esta ayuda.
Reiteró que El Salvador es la nación centroamericana que más ha reducido su migración irregular "y seguimos trabajando bajo un enfoque regional para construir una Centroamérica segura, educada y prospera".