El comandante estadounidense en Irak, Ray Odierno, anunciará al Congreso que las fuerzas armadas retirarán 4.000 soldados adicionales de Irak el próximo mes.
El general del Ejército, Ray Odierno, tiene previsto testificar ante la Comisión de Servicios Armados de la Cámara de Representantes sobre la transición de responsabilidades de seguridad de los militares estadounidenses a las fuerzas iraquíes.
Según el general, esto es parte de la ya planeada retirada de fuerzas de combate estadounidenses el año próximo.
Odierno dice que Estados Unidos reducirá el número de soldados en Irak de 124.000 a 120.000. El general asegura que la reducción no afectará la seguridad en ese país.
El testimonio del general Odierno tendrá lugar mientras miembros del Congreso están cada vez más preocupados por la capacidad de los militares y la policía de Irak para hacerse cargo de la seguridad.
A comienzos de este mes, el embajador estadounidense en Irak, Chirstopher Hill, expresó confianza en la capacidad de los militares iraquíes.
“Estamos respaldando este cronograma. Trabajamos muy de cerca con los iraquíes. Creemos que sus instituciones pueden sobrevivir”, señaló HIl.
Durante una visita a Irak a comienzos de septiembre (2009), el vicepresidente Joe Biden describió al general Odierno como “optimista” por pensar que las fuerzas iraquíes estarán listas para tomar la responsabilidad de mano de los estadounidenses.