Las protestas de cientos de manifestantes en EE.UU. contra la precaria situación económica y la codicia de las corporaciones iniciadas en Nueva York van camino a su tercera semana con demostraciones convocadas en varias ciudades del país.
Desde el pasado 17 de septiembre hay manifestantes acampados en dos parques de la Gran Manzana, pero también otros han decidido marchar hacia diferentes bancos y levantar campamentos en parques de todo el país, incluida la ciudad de Los Angeles, en la costa oeste.
Seguidores del movimiento de los indignados estadounidenses, que se ha dado en llamar “Ocupar Wall Street", marcharon nuevamente por el centro financiero frente a la Bolsa de Nueva York, esta vez muchos de ellos disfrazados de "zombis” empresariales.
En las protestas se han visto carteles con lemas como "Después de la primavera árabe, llega el otoño estadounidense" y "A los bancos los rescataron, a nosotros nos timaron", en alusión a la ayuda dada por Washington a las grandes instituciones financieras para salvarlas de la quiebra.
A golpe de tambores, los indignados marcharon por el distrito financiero de la ciudad de Chicago, y otros también lo hicieron en Boston, San Luis, Kansas City y Misouri.
La composición de las protestas es diversa, desde estudiantes universitarios a quienes les preocupa las escasas posibilidades de poder conseguir un buen empleo, hasta trabajadores que recientemente han quedado desempleados.
Las protestas han adquirido un matiz más dinámico y organizado luego de que alrededor de 700 manifestantes fueron detenidos el sábado pasado en Nueva York por obstruir el tráfico en el Puente de Brooklyn.