El impacto de un tornado sobre una planta de suministro de partes cruciales en Carolina del Sur podría no alterar la producción de automóviles tanto como se temía.
Toyota y Fiat Chrysler indicaron el jueves que no prevén que los daños a la fábrica BorgWarner en la ciudad de Seneca afecten el proceso.
BorgWarner fabrica cajas de transferencia para camionetas pickup grandes en la planta, la cual resultó severamente dañada por un tornado el pasado 13 de abril que causó la muerte de un guardia de seguridad. Las cajas de transferencia son las que pasan la potencia a un segundo eje de transmisión en vehículos de doble tracción.
La planta suministra repuestos para las camionetas pickup Ford Serie F, el vehículo más vendido en Estados Unidos, así como las pickups Ram de Fiat Chrysler y Tundra de Toyota.
Chris Reynolds, director administrativo de manufactura para Toyota en Norteamérica, informó que BorgWarner ha tomado “una serie de medidas de compensación” que han resultado efectivas y que Toyota tiene algunos repuestos almacenados.
Toyota y otros fabricantes de autos cerraron sus fábricas hace aproximadamente un mes para contener la propagación del coronavirus, y la mayoría intenta recomenzar la producción en las próximas dos semanas.
En un comunicado, Fiat Chrysler también dio a conocer que espera no sufrir ninguna alteración en sus planes de reabrir las plantas, lo cual también está programado para el 4 de mayo.
Ford, en un documento presentado la semana pasada ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos, indicó que no tiene suficiente información para pronosticar cuándo reanudará operaciones la fábrica de BorgWarner.
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