El procurador general de EE.UU. Jeff Sessions, anunció que se desvinculará de toda investigación sobre la campaña del presidente Donald Trump o sobre la interferencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016.
Sus actos ocurren tras las revelaciones de que se encontró dos veces con el embajador ruso durante la campaña presidencial de 2016 y no informó de ello durante su audiencia ante el Congreso.
En conferencia de prensa, este jueves, Sessions, respondió a las crecientes críticas y llamados para que renuncie o para que por lo menos diga públicamente que no participará en investigaciones del Departamento de Justicia, que ahora preside, sobre presunta interferencia rusa en las elecciones presidenciales del año pasado.
Sessions explicó que sus dos conversaciones el año pasado con el embajador ruso Sergey I. Kislyak, denunciadas por el Washington Post, tuvieron lugar en medio de la presunta interferencia rusa contra la campaña de Hillary Clinton, y además de ser muy breves no tuvieron que ver con la campaña presidencial.
El exsenador republicano rechazó cualquier insinuación de que tratara de engañar a alguien sobre sus contactos con Rusia al indicar: "Esa no es mi intención. Eso no es correcto".
El secretario de Justicia dijo que tomó la decisión después de que su personal le recomendó que se recusara de cualquier investigación relacionada con la campaña de Trump, dado que estuvo involucrado en ella.
Sessions añadió que su anuncio "no debe ser interpretado como la confirmación de la existencia de cualquier investigación".
Poco antes de la conferencia de prensa, el presidente Donald Trump había expresado su respaldo al Procurador General y dijo que no debería retirarse de las investigaciones.
Sessions fue un importante asesor y representante de la campaña de Trump.
Anteriormente, la Casa Blanca respaldó a Sessions, aunque funcionarios indicaron que se enteraron en principio sobre sus contactos con el embajador el miércoles por la noche por medio de un reportero.
El Departamento de Justicia sostiene que no existe nada inapropiado en torno a los contactos de Sessions o sus respuestas ante el Congreso, mientras que las continuas acusaciones de interferencia rusa en la política estadounidense alentaron los llamados por parte de los demócratas no solo para que Sessions se recuse, sino también para que renuncie al cargo.
Durante la conferencia de prensa de este jueves, Sessions prometió aclarar por escrito la declaración que hizo ante la Comisión Judicial del Senado durante su audiencia de nominación.
