El presidente Barack Obama dijo este jueves que Estados Unidos puede probar las denuncias de que Irán estuvo involucrado en un complot para asesinar al embajador de Arabia Saudita en Washington.
Durante una rueda de prensa en la Casa Blanca en compañía del presidente surcoreano Lee Myung-bak, Obama declaró que la conjura es parte de un "comportamiento peligroso y temerario" por parte del régimen de Teherán.
Precisó que uno de los dos acusados, un iraní-estadounidense tenía “vínculos directos, fue pagado y dirigido por individuos en el gobierno de Irán”.
Obama aseguró que EE.UU. ya ha compartido con sus aliados las evidencias de la complicidad de Irán, cuyo gobierno ha negado haber estado involucrado en el complot.
“Los hechos están ahí”, dijo el presidente de EE.UU. refiriéndose a la acusación ante un tribunal en Nueva York de los dos hombres, uno de ellos miembro del cuerpo élite Quds de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, quienes se habrían conjurado para matar al diplomático saudí.
Según Obama, el hecho demuestra en qué grado el gobierno iraní “ha vivido durante demasiado tiempo fuera de las normas aceptadas de comportamiento internacional".
El presidente estadounidense prometió que los acusados serán juzgados, y que EE.UU. movilizará a la comunidad internacional para asegurar que “Irán quede más y más aislado y pague un precio por este tipo de comportamiento".
A la luz del complot para asesinar al embajador saudì, la oficina del senador demócrata Bob Menéndez informó que esta tarde el legislador demandará ante el Congreso la adopción de sanciones más severas de Washington contra el régimen de Teherán.
Por su parte, Arabia Saudita dijo este jueves que responsabilizará a las autoridades iraníes de cualquier acción hostil, y calificó de plan "cruel" el intento de asesinar a Adel al-Jubeir, representante del reino árabe en Washington.
El canciller saudí, el príncipe Saud al-Faisal, dijo en Viena que el gobierno de Irán busca ganar influencias en el mundo por medio del "asesinato y el caos", y aseveró que cualquier acción que emprenda Irán contra de Arabia Saudita “tendrá una respuesta adecuada”.
Faisal no especificó qué tipo de respuesta podría dar su gobierno contra Irán. “Tenemos que esperar y ver”, dijo.