Estados Unidos enviará unas 600 tropas adicionales a Irak para asistir a las fuerzas locales en la batalla para retomar Mosul del control del Estado Islámico.
Es el tercer emplazamiento adicional de militares estadounidenses desde abril, lo que subraya las dificultades que el presidente Barack Obama ha tenido para retirar a las fuerzas de Estados Unidos del país.
Hablando a los reporteros, el secretario de Defensa estadounidense Ashton Carter dijo que el aumento es parte de la “campaña acelerada” de la coalición para “aislar y colapsar” el control de ISIS sobre Mosul y “expandir los logros de las fuerzas de seguridad iraquís en otras partes de Irak”.
Un funcionario de Defensa de Estados Unidos habló de 615 soldados, lo que llevaría el número de tropas estadounidenses autorizadas a pelear contra ISIS en Irak a 5.262.
"El presidente Barack Obama fue consultado sobre un pedido del gobierno iraquí para un último aumento en el número de entrenadores y asesores bajo el amparo de la coalición internacional en Irak", dice un comunicado del primer ministro iraquí Haider al-Abadi.
Las nuevas tropas entrenarán y asesorarán a las fuerzas de seguridad iraquíes y peshmerga curdas, especialmente en la lucha por Mosul, pero también servirán para "proteger y ampliar las ganancias de seguridad iraquíes en otras partes de Irak", dijo Carter.
"Lo hemos dicho todo el tiempo, cada vez que veamos oportunidades de acelerar la campaña vamos a aprovecharlas", añadió el funcionario.
Algunas de las tropas estadounidenses irán a la base aérea de Ain al Asad, en el occidente de Irak, donde cientos de soldados americanos han estado entrenando a las fuerzas armadas iraquíes.
El secretario Carter, que habló con periodistas en Nuevo México, dijo que no debe haber dudas de que, "las fuerzas estadounidenses que combaten a ISIL en Irak van a estar en peligro".
Estados Unidos tiene 4.565 soldados en Irak actualmente como parte de una coalición internacional que lidera y provee extenso apoyo aéreo, entrenamiento y asesoría al ejército iraquí.
