Geraldine Ferraro, la congresista que en 1984 acompañó como candidata a la vicepresidencia de EE.UU. al demócrata Walter Mondale, murió este sábado a la edad de 75 años.
Ferraro, la primera mujer en acompañar en la boleta electoral al candidato a la presidencia por uno de los dos mayores partidos políticos del país, falleció en el Hospital General de Massachusetts, donde recibía tratamiento por un cáncer en la sangre.
Después de haber sido seis años legisladora en el Congreso, Ferraro alcanzó gran notoriedad cuando en la Convención Demócrata de 1984 fue escogida como segunda de Mondale para disputarle la Casa Blanca a Ronald Reagan y a su vice, George H.W.Bush, quienes finalmente resultaron reelectos por abrumadora mayoría de votos.
Abogada de profesión, tras perder los comicios, Ferraro se desempeñó en la cátedra del Instituto de Política de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy en la Universidad de Harvard.
Un hijo suyo, John Zaccaro Jr., fue hallado culpable en 1988 de vender cocaína a un agente encubierto en Vermont, lo que aparentemente perjudicó las futuras aspiraciones políticas de Ferarro, que perdió dos nominaciones demócratas al Senado, en 1992 y 1998. Previamente, de 1996 a 1997 fue copresentadora del programa “Crossfire” de la cadena CNN.
Su destacada labor como defensora de las mujeres víctimas de abusos durante la guerra en la antigua Yugoslavia le valió para que el presidente Bill Clinton la nombrara embajadora ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU (1994-1995).