Organizaciones que han trabajado estrechamente con la administración Obama para mejorar las relaciones con Cuba publicaron el martes una carta de cuatro páginas dirigida al presidente electo Donald Trump, instándole a no actuar apresuradamente hacia la nación de gobierno comunista.
El Cuban Study Group, una organización de empresarios cubano-estadounidenses que respalda la apertura de relaciones con Cuba, y la coalición Engage Cuba, con sede en Washington, escribieron el memorando que advierte a Trump "que revertir reflexivamente el curso podría tener perniciosas consecuencias para los intereses económicos y políticos de Estados Unidos y para las perspectivas de cambio evolucionario en Cuba".
El equipo de transición del presidente electo incluye a cinco cubano-estadounidenses que se oponen abiertamente al descongelamiento y tienen estrechos vínculos con legisladores cubano-estadounidenses que abogan por el retorno a los esfuerzos pre-Obama para aislar a Cuba.
La nueva política es positiva
Varios otros nominados de Trump han expresado su oposición al esfuerzo de dos años de la administración Obama para normalizar relaciones con Cuba.
"Confiamos en que una minuciosa evaluación confirmará que el acercamiento constructivo - incluida la reducción de barreras de viaje y comerciales- es la mejor estrategia para apoyar al gobierno cubano e impulsar los empleos y las exportaciones de Estados Unidos", dicen los signatarios del memorando a Trump, entre los que se incluyen el U.S. Cuba Business Council, el National Foreign Trade Council, la American Society of Travel Agents y la Association of Internacional Educators.
Las organizaciones afirman que la apertura con Cuba ha mejorado los derechos humanos en la isla, ha acelerado la expansión del acceso a internet, ha permitido el diálogo sobre temas delicados, ha mejorado la seguridad nacional y ha creado empleos, entre otros resultados positivos.
El informe, sigue a la publicación la semana pasada de un pedido similar por parte de docenas de organizaciones agrícolas estadounidenses, las cuales dicen que Cuba es un importante mercado para sus productos.
Trump, quien es republicano, ha prometido desmantelar la todavía frágil apertura a menos que Cuba ofrezca a Estados Unidos un mejor acuerdo, pero no ha dado detalles de lo que será su política.
Se espera que el nuevo mandatario estadounidense revise el acercamiento con Cuba después que asuma el poder el viernes. Trump ha nombrado a Jason Greenblatt, un ejecutivo de la Organización Trump y su principal asesor legal, como negociador para asuntos internacionales sensibles, incluida Cuba.
Restauración de relaciones diplomáticas
La normalización de relaciones entre las dos naciones enemigas de la Guerra Fría ha incluido la restauración de relaciones diplomáticas, el histórico viaje de Obama a Cuba, la firma de 18 acuerdos de cooperación y el uso de órdenes ejecutivas para debilitar el embargo impuesto a la Isla hace más de 50 años, el cual puede ser únicamente levantado por el Congreso estadounidense, actualmente controlado por los republicanos.
Los viajes a la Isla desde Estados Unidos han aumentado con el inicio de vuelos directos y cruceros y con la firma de acuerdos de comunicación celular, pero no se han firmado aún convenios comerciales significativos.