Legisladores de la Cámara de Representantes se disponen a votar este martes 20 de diciembre de 2011 contra un acuerdo bipartidista alcanzado en el Senado que extiende por dos meses una rebaja de impuestos a los salarios impulsada por el presidente Barack Obama, dejando abierta la posibilidad de que los trabajadores vean una disminución en sus cheques de pago a partir del 1º de enero de 2012.
Los republicanos quieren que la extensión sea por un año. El líder de la mayoría en la Cámara, Eric Cantor, dijo a los periodistas que la extensión por dos meses es una solución no viable y prometió continuar presionando por la extensión a un año.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes, John Boehner, dijo que las diferencias entre el Senado y la Cámara tienen que ser resueltas en una reunión entre las dos cámaras. Sin embargo, líderes del Senado han dicho que no tienen planes de negociar un nuevo acuerdo antes de fin de año.
Mayoría en el Senado
El pasado sábado 17 de diciembre de 2011 el Senado aprobó por abrumadora mayoría una extensión por dos meses de una reducción al impuesto a la nómina de pago para $160 millones de estadounidenses.
El presidente Barack Obama dijo que estaba muy complacido con los senadores por haber aprobado la medida, a pesar que él quería que la extensión fuera por un año.
El Senado aprobó extender los beneficios de desempleo y prorrogar un recorte fiscal por otros dos meses ante la imposibilidad de hacerlo efectivo durante por un año más, pero la mayoría republicana de la Cámara se opone al proyecto de ley.
El republicano John Boehner, presidente de la Cámara de Representantes, dijo que es hora de dejarse de “tonterías” y solucionar las diferencias de otra manera para ofrecer "garantías a la gente que intenta crear puestos de trabajo".
El líder republicano dijo no creer que las diferencias entre la Cámara y el Senado “sean tan grandes”, pero no específico cómo sería un nuevo compromiso legislativo después de lo ya acordado por los senadores.
Si los legisladores de una y otra cámara no se ponen de acuerdo, tanto el recorte de los impuestos sobre nómina, que favorecen a unos 160 millones de trabajadores, como el de beneficios a largo plazo para los desempleados expirarán el 1ro. de enero.
Eric Cantor, líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, dijo que los congresistas no permitirían que los impuestos volvieran a aumentar pero no dijo cómo se proponen solucionar la disputa.
“Vamos a seguir aquí haciendo nuestro trabajo hasta que garanticemos que nadie encare un aumento tributario el año entrante”, dijo.
En una entrevista por televisión antes de que Boehner diera su rueda de prensa, el director de comunicaciones de la Casa Blanca, Dan Pfeiffer, acusó al presidente de la Cámara de Representantes de dar marcha atrás sobre el acuerdo a causa de una “rebelión del tea party”.
Sin embargo, Boehner, dijo que desde el principio, cuando los senadores acordaron prorrogar el alivio tributario por dos meses, él se opuso a la idea.
El presidente Barack Obama ha dicho repetidamente que el Congreso no debe recesar su trabajo este año hasta que la rebaja tributaria sea renovada.