Los gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela no serán invitados a la Cumbre de las Américas que tendrá lugar en la ciudad de Los Ángeles en junio venidero, dijo el lunes el secretario asistente del Departamento de Estado para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols, a NTN24.
"Cuba, Nicaragua, el régimen de [Nicolás] Maduro [en Venezuela] no respetan la Carta Democrática de las Américas y por lo tanto, no espero su presencia" en la Cumbre, dijo Nichols.
La semana pasada el canciller cubano, Bruno Rodríguez, se quejó en una conferencia de prensa en La Habana de que Washington ya planeaba su exclusión.
"Debo denunciar que el gobierno de Estados Unidos ha decidido excluir a Cuba de los preparativos de la IX Cumbre de Las Américas", aseveró Rodríguez en una declaración a periodistas.
Nichols dijo además este lunes que la Cumbre se produce en "un momento clave en nuestro hemisferio, un momento en que estamos enfrentando muchos retos a la democracia".
La tensión de las relaciones de EEUU con Venezuela aumentaron cuando en 2014 explotaron protestas en el país sudamericano contra el presidente Nicolás Maduro que dejaron decenas de muertos, miles de heridos y detenidos.
Estados Unidos ha denunciado la ola de encarcelamientos en Nicaragua de candidatos a las elecciones presidenciales del año pasado, que dejó libre el camino para la reelección del actual mandatario Daniel Ortega y su esposa, la vicepresidenta Rosario Murillo.
Tras cuatro años de gobierno republicano bajo Donald Trump, las relaciones de Washington y La Habana no podían quedar más tensas, por lo que la llegada del presidente Joe Biden a la Casa Blanca suponía un alivio en la tirantez política.
Pero el gobierno de Miguel Díaz-Canel reprimió de manera violenta las protestas masivas que estallaron en más de 60 localidades a lo largo de la isla en julio de 2021. Muchos de los manifestantes han sido condenados a largas penas de cárcel sin el debido proceso, lo que ha sido señalado tanto por EEUU como por organismos internacionales.
Recientemente La Habana y Washington retomaron las conversaciones migratorias, interrumpidas en 2018, buscando hacer frente a la inmigración irregular.
"Es paradójico porque (...) acabamos de tener conversaciones migratorias oficiales, que son sin lugar a dudas un signo positivo (...)", zanjó el canciller cubano la semana pasada.
Ninguno de los tres gobiernos ha reaccionado a los comentarios de Nichols.
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