Los gobiernos de EE.UU. y China señalaron que van a trabajar conjuntamente para tratar de persuadir al régimen norcoreano de que cese su programa de desarrollo de armas nucleares.
El jefe de la diplomacia estadounidense, Rex Tillerson, y el presidente chino Xi Jinping, acordaron este punto específico durante un encuentro en Pekín, donde además anunciaron trabajar juntos para reforzar los vínculos bilaterales.
“Sabemos que a través del diálogo lograremos comprendernos mejor y eso permitirá reforzar los lazos entre China y Estados Unidos y marcará el rumbo de nuestra futura cooperación”, dijo Tillerson durante la reunión.
El acuerdo para trabajar con China en Corea del Norte, se vio envuelto en palabras calurosas del presidente chino este domingo hacia el secretario de Estado estadounidense, quien termina el primer viaje a Asia desde que asumió el cargo.
Y como respuesta a este encuentro, el líder norcoreano Kim Jong-un, supervisó este sábado una prueba en tierra de un motor para cohetes y afirmó que se abría “una nueva era” en la tecnología de su país.
China se ha irritado al ser repetidamente acusado por Washington por no controlar los programas nucleares y de misiles de Corea del Norte, además de la decisión estadounidense de establecer un avanzado sistema de defensa antimisiles en Corea del Sur.
Beijing también sospecha de las intenciones de Estados Unidos hacia la auto-gobernada Taiwán, de la que China afirma es propia, ya que la administración Trump elabora un gran paquete de armas nuevas para la isla.
Palabras de alabanza
Xi dijo que Tillerson había hecho un gran esfuerzo para lograr una transición suave en una nueva era de relaciones.
"Usted dijo que entre China-Estados Unidos las relaciones sólo pueden ser amistosas. Expreso mi aprecio por esto", dijo Xi.
Xi dijo que se había comunicado con el presidente Donald Trump varias veces a través de conversaciones telefónicas y mensajes.
"Ambos creemos que China y Estados Unidos deben tener cooperación en adelante es la dirección por la que ambos estamos luchando. Ambos esperamos una nueva era para el desarrollo constructivo", agregó Xi.
"Los intereses conjuntos de China y Estados Unidos superan con creces las diferencias, y la cooperación es la única opción correcta para nosotros", agregó Xi, en comentarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
China y Estados Unidos deben fortalecer la coordinación de los asuntos regionales candentes, respetar los intereses y las principales preocupaciones de los demás, y proteger la amplia estabilidad de los lazos, puntualizó Xi.
Socio
Tillerson respondió que Trump pone un "valor muy alto en las comunicaciones que ya han ocurrido" entre Xi y el presidente estadounidense.
"Y espera poder mejorar esa comprensión en la oportunidad de una visita en el futuro", dijo Tillerson.
"Sabemos que a través de un mayor diálogo conseguiremos un mayor entendimiento que llevará a un fortalecimiento de los lazos entre China y Estados Unidos y dará el tono para nuestra futura relación de cooperación", anotó el secretario de Estado.
Este acercamiento contrasta con los ataques de Trump a China durante toda su campaña electoral a la que acusó de “robar” millones de empleos a Estados Unidos y amenazó con imponer aranceles comerciales prohibitivos.
Evitar un conflicto con Pyongyang
El secretario de Estado, Rex Tillerson, aseveró en Pekín que los gobiernos de Estados Unidos y China están de acuerdo en un punto: la tensión en la península coreana ha alcanzado un nivel "bastante peligroso" y ello demanda hacer "todo lo posible" para evitar un conflicto.
Así lo dio a conocer Tillerson en el último día de una gira por tres países asiáticos, la cual estuvo muy marcada por la política hacia una incómoda Corea del Norte.
"Creo que compartimos la opinión de que las tensiones en la península son ahora bastante altas y de que las cosas han alcanzado un nivel bastante peligroso", afirmó Tillerson en rueda de prensa tras reunirse en Pekín con el ministro chino de Asuntos Exteriores, Wang Yi.
"Nos hemos comprometido a hacer todo lo que podamos para prevenir el estallido de cualquier tipo de conflicto", añadió Tillerson.
Un día antes, desde Seúl, Rex Tillerson subrayó que si el régimen de Pyongyang continúa alimentando su plan de hacerse con un arsenal nuclear, un ataque militar "es una opción que está sobre la mesa".
La visita de Tillerson a China, la primera de un miembro del Gobierno del presidente Donald Trump, es la última etapa de su gira por Asia que es también su primer viaje al exterior tras llegar al cargo.
El secretario de Estado hizo paradas en Japón y Seúl, y en estos países aliados advirtió de que la diplomacia paciente de la era del anterior presidente estadounidense, Barack Obama, se ha terminado a la hora de lidiar con el programa nuclear norcoreano.
"Trabajaremos juntos para ver si podemos llevar al gobierno de Pyongyang a cambiar de posición (...) y alejarse del desarrollo de armas nucleares", añadió.
El ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, destacó por su parte que la reunión con Tillerson fue muy "productiva" e insistió en que el conflicto en la península coreana debe solucionarse a través del diálogo.
"Damos gran importancia a su visita", le trasladó Wang a su homólogo estadounidense en su encuentro.
El ministro chino reafirmó por su parte la posición de Pekín, único aliado del régimen de Pyongyang, que estipula que la única manera de resolver la crisis en Corea es a través del diálogo.
"Podemos escoger entre dejar que la situación se deteriore hasta desembocar en un conflicto, o bien regresar al camino adecuado de las negociaciones", declaró Wang.
Según Wang, ambos cancilleres trataron algunas de sus mayores diferencias durante la reunión, entre ellas, la soberanía china de Taiwán, las disputas en el mar de China Meridional o la instalación del sistema estadounidense de misiles THAAD en suelo norcoreano, al que Pekín se opone totalmente.