CHICAGO -- El fiscal general de EE.UU. Jeff Sessions no puede seguir por lo menos por ahora con su amenaza de retener los fondos de subvención de seguridad pública a Chicago y otras ciudades santuarios por negarse a imponer duras nuevas políticas de inmigración, dijo un juez el viernes en una derrota legal para la administración Trump.
En lo que es al menos una victoria temporal para las ciudades que han desafiado a Sessions, el juez de distrito de los Estados Unidos Harry Leinenweber dictaminó que el Departamento de Justicia (DOJ por sus siglas en inglés) no podía imponer las condiciones.
El juez Leinenweber dijo que la Ciudad había demostrado una "probabilidad de éxito" al argumentar que Sessions excedió su autoridad con las nuevas condiciones. Entre ellas están los requisitos de que las ciudades notifiquen a los agentes de inmigración cuando alguien que está en el país ilegalmente está a punto de ser liberado de las cárceles locales y permitir a los agentes el acceso a las prisiones.
"El daño a la relación de la Ciudad con la comunidad inmigrante si se accede a las condiciones es irreparable. Una vez que se pierde esa confianza, no puede ser reparada mediante un fallo que otorgue dinero por daños”, dijo el juez Leinenweber en su decisión.
La Ciudad pidió al juez una orden de suspensión temporal a nivel nacional esta semana, pidiéndole al juez que no permita que el Departamento de Justicia imponga los requisitos hasta que proceda en el tribunal la demanda de la ciudad contra el Departamento.
Funcionarios de Chicago han dicho que tal decisión impediría que el Departamento de Justicia retenga a las ciudades las llamadas Subvenciones de Asistencia en Memoria de Edward Byrne, basadas en su negativa a tomar las medidas Sesiones ordenadas.
Chicago ha solicitado $ 2,2 millones en dinero de la subvención federal $ 1,5 millones para la ciudad y el resto para el condado de Cook y otros 10 suburbios. Pero en una reciente audiencia judicial, los abogados que representan a la ciudad dijeron que más de 30 otras jurisdicciones en todo Estados Unidos presentaron informes judiciales que apoyan la demanda de Chicago y que tienen hasta $ 35 millones en subsidios en juego.
Al menos siete ciudades y condados, incluyendo Seattle y San Francisco, así como el estado de California, se niegan a cooperar con las nuevas reglas federales.
Aunque los $ 1,5 millones son sólo una pequeña fracción del presupuesto de la Ciudad, el fallo podría ser una gran victoria para una ciudad que ha estado en una pelea pública con Sessions.
El alcalde Rahm Emanuel dijo que la ciudad no sería "chantajeada" para cambiar sus valores como una ciudad que da la bienvenida a los inmigrantes.
En su cuenta de Twitter, Emanuel dijo: "Esta no es solo una victoria para Chicago. Este es un triunfo para las ciudades en todo EE.UU. que apoyaron nuestra demanda contra el DOJ de Trump defendiendo nuestros valores".
Sessions respondió que la administración Trump "simplemente no regalará dinero a los gobiernos municipales que violan orgullosamente la ley y protegen a extranjeros criminales a expensas de la seguridad pública".
El fallo es otro golpe para Sessions, un veterano defensor de leyes de inmigración más duras. A principios de este mes, las Sesiones anunciaron que el gobierno pondría fin a un programa que protege a los jóvenes inmigrantes que fueron traídos ilegalmente a Estados Unidos como niños o que vinieron con familias que excedieron sus visas. Trump anunció más tarde que estaba trabajando en un acuerdo para protegerlos.
Si la decisión significa que Leinenweber decidirá en última instancia en favor de la ciudad no está claro.
Durante una audiencia, Ron Safer, un abogado que representa a la ciudad, dijo que si el Departamento de Justicia prevalece, Sessions podría utilizar el mismo argumento para "capturar" aún más autoridad para vincular fondos de subvención para hacer lo que quiere.
