La Cámara de Representantes de Estados Unidos votó el jueves para renovar una ley clave de vigilancia, conocida como FISA por sus siglas en inglés, que se usa para frustrar a los terroristas extranjeros que planean ataques contra estadounidenses.
Los legisladores votaron 256-164 por la medida de seguridad nacional crítica, pero la aprobación de la legislación quedó en entredicho cuando el presidente Donald Trump sugirió en Twitter el jueves por la mañana, sin ninguna evidencia de respaldo, que la ley podría haber sido utilizada para espiar en su campaña electoral de 2016, lo que pareció indicar su oposición a la renovación de la ley.
"La Cámara vota hoy sobre la controvertida Ley FISA". Es la ley que puede haberse usado, con ayuda del falso y desacreditado Expediente, para vigilar y abusar de la Campaña Trump por la administración anterior y otros?", escribió el presidente.
Pero una hora y media más tarde, Trump tuiteó su apoyo a la legislación, diciendo que "se trata de la vigilancia extranjera de extranjeros malvados en tierras extranjeras. ¡Lo necesitamos! ¡Sea inteligente!".
La vocera de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, rebatió las preguntas de periodistas sobre los confusos mensajes presidenciales sobre FISA, diciendo que la administración no estaba confundida "pero algunos de ustedes estaban".
Sanders dijo que la Ley de Vigilancia contra el Terrorismo es una prioridad para el Presidente, quien "la entiende claramente".
Según reportes de medios estadounidenses el primer tuit del presidente casi impidió la votación en la Cámara sobre la ley FISA, e hizo que el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan interviniera ante Trump para instarle a enviar el segundo tuit en el que parcialmente retiró las críticas a la ley de vigilancia extranjera anti-terrorismo.
Sarah Sanders también desmintió que haya habido más contactos de los normales el jueves por la mañana entre el Congreso y la Casa Blanca. “Siempre estamos en contacto con los miembros del Congreso”, dijo la portavoz a los periodistas en la conferencia diaria en la Mansión Ejecutiva.
Aclaró que el presidente “tiene algunas preocupaciones respecto al programa FISA”, pero dijo que le alegra que la ley haya sido aprobada y afirmó que los tuits de Trump de esta mañana “no fueron contradictorios”.
El programa, que es parte de la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera, permite a las agencias de espionaje de Estados Unidos, incluida la Agencia de Seguridad Nacional, recolectar textos y correos electrónicos de extranjeros en el exterior sin autorización, incluso cuando se están comunicando con estadounidenses.
Algunos legisladores han expresado preocupación por el alcance de la ley porque las conversaciones de los estadounidenses que no se sospecha que planean un ataque terrorista pueden ser inadvertidamente recolectadas en las escuchas.
La legislación aprobada por la Cámara que exige una renovación de seis años aún debe ser aprobada por el Senado antes de que Trump pueda promulgarla. Requiere que el Departamento Federal de Investigaciones (FBI), la principal agencia de investigación criminal del país, obtenga una orden de registro si quiere leer el contenido de las conversaciones de los estadounidenses atrapadas en la vigilancia.
Pero la Cámara de Representantes rechazó, en un voto 233-183, restricciones más estrictas sobre el FBI que hubieran requerido que obtuviera una orden de arresto, incluso cuando al comenzar su búsqueda en la base de datos de vigilancia cuando los estadounidenses podrían estar involucrados.
El director del FBI Christopher Wray dice que la ley es una herramienta valiosa para EE.UU. en la lucha contra el terrorismo. Los funcionarios en los últimos años han citado evidencia que obtuvieron de la vigilancia como dar a las agencias de policiales la información que necesitan para detener futuros ataques terroristas.
El presidente de la Cámara, Paul Ryan, dijo que en marzo de 2016 el espionaje "nos dio la inteligencia que necesitábamos para perseguir y matar al ministro de finanzas de ISIS. Gracias a la información recabada bajo este programa, un terrorista extranjero en suelo extranjero, el número dos de ISIS, que estaba en línea para convertirse en el próximo líder...este programa nos ayudó a obtener la información para detenerlo ".
Ryan dijo que en otro caso, la vigilancia permitió frustrar un ataque con bomba en 2009 al sistema de metro de Nueva York. Dijo que la vigilancia fue utilizada "para entender lo que la gente estaba planeando en el exterior y lo que estaban tratando de hacer aquí en Estados Unidos, para poder conectar los puntos y detener ese ataque terrorista en particular".
El presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara, Devin Nunes, republicano por California, calificó la aprobación de la medida como un "gran paso para garantizar la continuación de una de las herramientas más vitales de la comunidad de inteligencia para rastrear a los terroristas extranjeros. Esta ley también provee nuevas medidas rigorosas para proteger la privacidad de los estadounidenses y para garantizar que el programa se utilice adecuadamente para atacar a terroristas extranjeros,