Reclamos latentes, divisiones políticas, una constante proliferación de propaganda neonazi en línea y la cercanía de las elecciones presidenciales de 2024 mantienen a Estados Unidos atrapado en un “entorno de mayor amenaza”, según la última advertencia de funcionarios de seguridad nacional.
El Departamento de Seguridad Nacional volvió a emitir el miércoles un boletín del Sistema Nacional de Asesoramiento contra el Terrorismo, en que dice que una combinación de ira, ideologías y oportunidades “representan una amenaza persistente y letal para el país”.
Esta es la octava vez que el DHS emite el boletín desde 2021, y este aviso reemplaza la advertencia anterior, emitida en noviembre pasado.
Sale a la luz pocos días después de que un hombre de 19 años del estado de Missouri estrelló un camión alquilado contra una barrera de seguridad de la Casa Blanca antes de ondear una bandera nazi, y cuando la nación conmemora el primer aniversario del tiroteo en una escuela en Uvalde, Texas, que dejó 19 niños y dos maestros muertos.
“Los trágicos eventos recientes resaltan el entorno de amenazas continuas y aumentadas que enfrenta nuestra nación”, dijo el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en un comunicado.
“Estas amenazas son impulsadas por extremistas violentos que buscan promover sus creencias ideológicas y agravios personales”, dijo. “Estamos trabajando con socios en todos los niveles del gobierno, dentro del sector privado y en las comunidades locales para mantener seguros a los estadounidenses”.
Al igual que los avisos anteriores, el último boletín advierte que la mayor amenaza proviene de individuos y pequeños grupos preparados para actuar, ya sea por motivos personales o por una variedad de creencias ideológicas.
“Continuamos escuchando y viendo llamados de extremistas violentos domésticos basados en puntos de vista ideológicos, llamados a la violencia”, dijo un alto funcionario a los periodistas bajo condición de anonimato según las reglas básicas establecidas por el DHS. “El ritmo y la seriedad de ese tipo de llamadas sigue siendo alto y ocurre de manera regular”.
El boletín del DHS señala, por ejemplo, el tiroteo del 6 de mayo en Allen, Texas, donde el responsable, Mauricio García, defendía creencias de supremacía blanca y de celibato involuntario o “incel”.
También destaca una serie de actos criminales en Georgia desde 2022, en que los sospechosos supuestamente citaron una variedad de puntos de vista, desde el anarquismo hasta los derechos de los animales, para planear un ataque a un centro de entrenamiento de seguridad pública.
Y las instalaciones gubernamentales son solo parte de una larga lista de objetivos potenciales, que incluyen la infraestructura crítica del país, los grupos religiosos, los asociados con la comunidad LGBTQIA+, las minorías raciales y étnicas y las escuelas.
Altos funcionarios de seguridad nacional dijeron el miércoles que parte de lo que hace que el entorno de amenazas sea tan peligroso es que los objetivos, como en algunos tiroteos escolares recientes, pueden tener poco o nada que ver con la motivación del atacante.
“Ni siquiera está claro que la escuela en sí misma estuviera vinculada de alguna manera con la narrativa ideológica o la queja de la persona”, dijo un segundo alto funcionario de seguridad nacional, también bajo condición de anonimato. “Simplemente sirve como un objetivo oportunista”.
El funcionario dijo que a pesar de las serias preocupaciones, no hay inteligencia en este momento que sugiera que grupos o individuos específicos se están preparando para ataques. Pero algunas de las tendencias son preocupantes.
“Sí parece haber un aumento en los llamados a la violencia basados en el tema neonazi, nacionalista blanco”, dijo el primer funcionario.
“Ese tema (neonazi) se está planteando con más eficacia ahora que años atrás”, agregó el funcionario, y dijo que varios textos prominentes de supremacistas blancos han estado ganando terreno en los foros en línea después de convertirse en audiolibros.
Los funcionarios de seguridad nacional dijeron que también están rastreando el impacto de los llamados, tanto públicos como en línea, para violencia contra los migrantes que llegan a la frontera sur de EEUU.
También ven un peligro potencial a medida que los candidatos comienzan a anunciar sus candidaturas para la presidencia y el ciclo electoral de 2024.
“Esperamos que las preguntas o inquietudes que las personas puedan tener sobre ese ciclo electoral y el proceso electoral puedan convertirse en una fuente de motivación para que una persona dé ese paso adicional hacia un acto extremista violento”, dijo el segundo funcionario.
El peligro aumentará, dijo, “si la terminología que rodea a las elecciones empieza a hablar de ellas en términos existenciales o apocalípticos”.
Además, los funcionarios dijeron que continúan preocupados por las amenazas de actores de naciones como Irán, así como por la amenaza potencial de grupos terroristas como el Estado Islámico y al-Qaeda, aunque algunos funcionarios en los últimos meses han minimizado la probabilidad de un ataque terrorista extranjero en suelo estadounidense.
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