La Organización Internacional del Trabajo (OIT) publicó en un nuevo informe que los salarios se redujeron durante los primeros seis meses del año debido a la pandemia de COVID-19, y que los grupos de la población más afectados fueron el sector femenino y los trabajadores con salarios más bajos.
La muestra se basa en datos de 30 países de África, América, Asia y Europa.
Una encuesta de 28 países europeos revela que sin los subsidios salariales, las mujeres habrían perdido el 8,1 por ciento de sus salarios en el segundo trimestre de este año en comparación con el 5,4 por ciento de los hombres. Los datos indican que el 50 por ciento de quienes tienen trabajos menos calificados habrían perdido más del 17 por ciento de sus salarios sin los subsidios.
La OIT afirma que el impacto desigual de la pandemia en los asalariados de las sociedades ricas es relevante para los países en desarrollo, donde los trabajadores de los sectores formales se han visto particularmente afectados.
A pesar del panorama sombrío, el director general de la OIT, Guy Ryder, dijo que hay algunas noticias positivas.
“El crecimiento de la desigualdad a causa de la crisis de la COVID-19 podría dejar un desolador saldo de pobreza e inestabilidad social y económica de enormes proporciones (…). Necesitamos políticas salariales adecuadas que tengan en cuenta la sostenibilidad del empleo y de las empresas, en las que se aborden también las desigualdades y la necesidad de sostener la demanda. Si queremos reconstruir pensando en un futuro mejor”.
Los economistas de la OIT advierten que es probable que la crisis del COVID-19 aumente considerablemente la pobreza y la desigualdad. Las cifras del Banco Mundial indican que el número de personas que caerán en la pobreza extrema debido a la pandemia podría estar entre los 88 y los 115 millones.
Ryder señala que el 90 por ciento de los 187 estados miembros de la OIT tiene algún tipo de salario mínimo. Eso, dijo, puede servir para disminuir el impacto de la pandemia en los trabajadores.
“Nuestro informe sugiere que los salarios mínimos adecuados tienen un potencial significativo para reducir tanto la desigualdad como la pobreza. Nuestros estudios muestran que podrían reducir la desigualdad de ingresos de los hogares hasta en un 10 por ciento a nivel nacional. Además, los salarios mínimos también pueden jugar un papel importante en la creación de una recuperación centrada en el ser humano ”, dijo.
El director de la OIT, además señala que la pandemia ha supuesto un golpe sin precedentes para el mundo laboral. Dijo que espera que las secuelas sean duraderas, turbulentas y llenas de incertidumbre.
Puntualizó que los subsidios e intervenciones del gobierno se reducirán con el tiempo, lo que ejercerá presión a la baja sobre los salarios. De ahí que deba haber un enfoque adecuado y equilibrado de los salarios en el proceso de recuperación para detener un resurgimiento de la pobreza y evitar una mayor ampliación de la desigualdad existente. Y por último, pero no menos importante, para mantener la economía en movimiento.
* Con colaboración de Lisa Schlein.