El impacto económico de la pandemia del coronavirus en América Latina será peor que el que tuvo la crisis financiera del 2009, con una caída del comercio exterior del 23 por ciento, comparado con la de un 21 por ciento hace once años, según el más reciente estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
La secretaria ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, dio a conocer el estudio en el cual se pronostica que las exportaciones regionales se contraerán en un 23 por ciento, mientras las importaciones se reducirán en un 25 por ciento, ésta última cifra también superior a la de 24 por ciento en el 2009.
La reducción del comercio latinoamericano se produce mientras el comercio mundial se ha contraído en un 17 por ciento entre enero y mayo del presente año. América Latina y el Caribe es la región en vías de desarrollo más afectada por la pandemia, siendo la manufactura, la minería y los combustibles los sectores más golpeados.
Según la CEPAL, el sector turismo se ha desplomado en un 50 por ciento y esto impactará en las exportaciones de servicios, especialmente en el Caribe. El comercio intraregional también se ha visto afectado en un 24 por ciento, especialmente en manufacturas.
“Profundizar la integración regional es crucial para salir de la crisis. Con pragmatismo, debemos rescatar la visión de un mercado latinoamericano integrado. Además, la región debe reducir costos mediante una logística eficiente, fluida y segura”, señaló Bárcena.
Durante los primeros cinco meses del 2020 hubo caídas en el valor de las exportaciones de Latinoamérica a Estados Unidos, en un 22 por ciento. El valor a lo exportado a la Unión Europea cayó en un 14 por ciento.
Por el contrario, los envíos a Asia han mostrado una mayor resiliencia. En particular, las exportaciones a China cayeron menos de 2% entre enero y mayo, y se recuperaron en abril y mayo, consistente con la gradual reapertura de su economía, lo que constituye un signo positivo, especialmente para los países sudamericanos exportadores de materias primas.
Al analizar el desempeño latinoamericano por sectores, se aprecia que la minería y el petróleo fueron los más afectados con casi un 26 por ciento, seguido por las manufacturas con un 18,5 por ciento. Los sectores agrícolas fueron los que registraron una muy leve alza de 0,9 por ciento, señala el informe.
Si se estudia el rendimiento por país, la CEPAL afirma que sólo cuatro países, todos centroamericanos, aumentaron sus exportaciones. Costa Rica, en un 2 por ciento, Honduras, dos por ciento, Guatemala, 3 por ciento, y Nicaragua, con un 14 por ciento.
Esto, según la CEPAL, se explica por una combinación de mayores ventas de suministros médicos y equipos de protección personal, de productos agrícolas, y la resiliencia del comercio entre la misma región.
Las importaciones, por otra parte, se redujeron parejas en toda la región, en un 17 por ciento, producto de la recesión en toda la región. Para los economistas es de particular preocupación la reducción en las importaciones de bienes de capital, en un 14,5 por ciento, que “afectará la tasa de inversión y comprometerá la recuperación”.
En tanto, el tráfico aéreo regional sufrió un verdadero derrumbe en este período: -95% en pasajeros y - 46% en carga, siguiendo la tendencia mundial, mientras que el cierre de actividades productivas, medidas sanitarias más estrictas y obstáculos administrativos han frenado también al transporte terrestre.
Según el organismo de las Naciones Unidas, ante la incertidumbre que ha traído la pandemia es crucial profundizar la integración y el comercio regional, aprovechando el mercado de 650 millones de habitantes que representa Latinoamérica.