El reporte laboral del Departamento de Trabajo de EE.UU. reflejó este jueves una ligera disminución de las solicitudes de beneficios por desempleo en la semana que concluyó el 23 de enero, pero la cifra sigue por encima del pico de 665.000 alcanzado durante la gran recesión de 2007-2009.
La cantidad de estadounidenses que solicitaron asistencia del gobierno por desempleo fue de 847.000, lo que sugiere que los despidos continúan en medio del reciente repunte de la pandemia de coronavirus.
El total fue de 67.000 solicitudes menos que la semana anterior, cuando se dispararon a 914.000, pero aún no se considera un respiro ni un indicador de que la economía pudiera estar mejorando.
No obstante, la caída indica que algunos de desempleados están encontrando nuevos trabajos y que otros ya alcanzaron el límite de sus beneficios.
En general, alrededor de 4,8 millones de estadounidenses continúan recibiendo la asistencia estatal tradicional por desempleo.
El coronavirus ha obligado a los gobiernos estatales y locales a restringir las operaciones de restaurantes, bares y otros negocios, y ha desalentado a los estadounidenses a salir de sus hogares.