El hospital que trató Thomas EricDuncan, el fallecido paciente de ébola, anunció que creará una fundación con su nombre, parte de un acuerdo legal con la familia del occiso.
El acuerdo, que incluye un monto de dinero no dado a conocer, evitará que la familia demande al Hospital Presbiteriano de Salud de Texas en Dallas.
El abogado de la familia, Les Weisbrod, dijo que el acuerdo era "muy bueno".
El Hospital Presbiteriano de Dallas inicialmente no admitió a Duncan, y lo envió a casa solo con antibióticos.
Eventualmente, Duncan fue admitido en el hospital el 28 de septiembre, pero para entonces los síntomas eran visibles. Murió 10 días después luego de transmitir el virus a dos enfermeras que lo atendieron.
Parientes de Duncan amenazaron con demandar al hospital porque piensan que no se le proveyó con ninguno de los tratamientos experimentales que sí se utilizaron en pacientes posteriores, insinuando que esto se debió a que era pobre, no estaba asegurado y era negro.
En una entrevista con la cadena CNN, un sobrino de Duncan, Josephous Weeks, dijo que “si hubiera sido de otro color, probablemente todavía estuviera vivo… Uno tiene oportunidad si eres blanco, pero no si eres negro”.
El hospital, por su parte, ha defendido el trato al paciente, el cual fue, según un comunicado, “del mismo nivel” que a cualquier otro paciente “sin importar de su nacionalidad o capacidad de pago”.