Los miembros de la Organización Mundial de la Salud alcanzaron esta semana un acuerdo preliminar para aumentar gradualmente sus cuotas obligatorias a partir de 2024, confirmó el jueves el jefe de la OMS en lo que describió como un "momento crucial" para la salud mundial.
La reforma del modelo de financiación del organismo, que tiene 74 años, es una prioridad para el Director General Tedros Adhanom Ghebreyesus, ya que pretende remodelarlo para responder al riesgo de más pandemias.
En la actualidad, el organismo depende en gran medida de las contribuciones voluntarias de gobiernos y donantes privados, que a menudo se destinan a programas específicos, lo que le resta flexibilidad.
"La recomendación (de los Estados miembros) de elevar las contribuciones señaladas al 50% empoderará a la OMS y salvaguardará su experiencia, mandato y legitimidad únicos", dijo Tedros en Twitter, confirmando la información de fuentes sobre las conversaciones a puerta cerrada celebradas anteriormente. "Una OMS fuerte nos mantiene a todos más seguros", añadió.
Alemania, que es el principal donante del organismo y cuyo nacional Björn Kümmel preside las conversaciones, también confirmó el resultado en Twitter.
El acuerdo adopta la forma de una recomendación que aún debe ser aprobada formalmente por los gobiernos en la Asamblea Mundial de la Salud del próximo mes.
Obstáculos para la reforma
El compromiso alcanzado a última hora del miércoles prevé que las cuotas obligatorias alcancen el 50% del presupuesto en 2028-2029, o posiblemente en 2030-31, dijeron las fuentes.
Las reformas de la financiación se han debatido durante el último año y medio y el compromiso, que está supeditado a ciertas condiciones como las medidas de transparencia, se diluyó debido a la oposición de algunos miembros.
"La OMS se enfrentaba a obstáculos en lo que respecta a la financiación, no sólo por parte de Estados Unidos, sino también de Rusia, Brasil y otros países en lo que respecta a las cuotas", afirmó Lawrence Gostin, profesor de Derecho en Georgetown, Washington D.C.
Una de las fuentes que siguió las conversaciones dijo que el apoyo de Estados Unidos había sido un "punto de inflexión" en las negociaciones.
Washington, históricamente el principal donante del organismo y ahora su número dos, revirtió este año el plan del expresidente Donald Trump de retirarse del organismo y ha prometido más financiación.
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